Un herido en el 11-M relata que antes de que su vagón explotara oyó la melodía de un móvil
Un jefe policial asegura que conoció la autoría islámica del 11-M por la prensa mientras que otro niega haber apuntado al explosivo de ETA
Actualizado:El juicio por los atentados del 11 de marzo que se sigue desde el pasado mes de febrero ha permitido hoy asistir al relato de más testigos directos de la matanza y de responsables policiales que participaron de forma directa o indirecta en la investigación.
En el lado de las víctimas, José Luis García ha relatado la explosión producida en el vagón en el que viajaba y ha detallado que antes de la deflagración escuchó sonar reiteradamente un teléfono móvil. "Se oyó cinco veces", con la melodía estandar de los teléfonos Nokia, ha declarado.
García consiguió salvar su vida, a pesar de que la bomba se encontraba a solo metro y medio de él ya que había "una persona corpulenta" delante suyo. Permaneció atrapado entres los listones del suelo hasta que le rescataron pasada la media hora. La víctima ha reclamado que se tomen "las medidas necesarias" para que no vuelva a ocurrir.
Disparidad policial
Los testimonios de la policía han estado protagonizados por el Comisario General de Policía Científica, Miguel Ángel Santano, quien ha asegurado que conoció la posibilidad de una autoría islámica en los atentados de Madrid a través de la prensa. "Nunca me informaron ni oficial ni oficiosamente", ha destacado. En cuanto al tipo de explosivo utilizado en la masacre, Santano ha revelado que nunca recibió información sobre el tema y que su Brigada nunca custodió ninguna muestra de dinamita.
Santano, quien se encuentra imputado en la causa abierta por el informe sobre el ácido bórico como presunto responsable de la eliminación de informaciones que relacionaban a ETA con los terroristas islamistas, ha precisado también que el funcionario jefe del servicio de noche participó de forma mínima en la desactivación de la mochila de Vallecas y en la explosión de Leganés. Además, ha segurado que nunca vio la furgoneta Kangoo de Alcalá de Henares. Tampoco se dirigió a ninguno de los focos de las explosiones ya que estaba en su despacho "coordinando".
También en el ámbito policial, el ex comisario general de Seguridad Ciudadana Santiago Cuadro ha negado haber trasladado certezas a sus superiores sobre la naturaleza del explosivo utilizado en los atentados. En concreto, ha desmentido lo manifestado por el subdirector operativo Díaz-Pintado, quien aseguró al tribunal que Cuadro le había dicho la mañana del 11M que se trataba de Titadyne, lo que hizo pensar que ETA era la autora de los atentados. Posteriormente se confirmó que no era así.
La taquillera de Alcalá
Raquel Fernández, taquillera de la estación de Renfe de Alcalá de Henares, que se encontraba trabajando la mañana del atentado, ha declarado que a una "hora temprana" una persona "con la boca tapada con una bufanda tipo braga y un gorro en la cabeza" compró un billete. "Solo se le veían los ojos y algo de la nariz". Lla persona tenía un tono de piel "tirando más a moreno que a claro" y hablaba castellano sin acento ninguno.
La taquillera ha precisado que el comprador del billete estuvo "un tiempo" para comprarlo, "más de lo normal" y que daba la sensación de que hacía preguntas sobre algo que ya conocía..
Dinamita «desperdigada» en Mina Conchita
El primer testigo en testificar esta mañana ha sido uno de los guardias civiles que después de los atentados de Madrid inspeccionó Mina Conchita, de donde fueron supuestamente sustraídos los explosivos del 11 -M. El agente ha asegurado que encontraron cuatro bolsas de dinamita Goma 2 Eco y Goma 2 Ec detrás de un cartón y cartuchos "desperdigados" entre unas rocas. Amparado por el sistema de protección de testigos, ha explicado que fueron a la explotación minera el 18 de junio de 2004, con la intención de tomar "muestras de tierra" del interior y exterior de la mina y recoger tornillería si había.
El agente ha apuntado que en las bolsas que encontraron habría "unos 16 o 17 cartuchos" y ha añadido que también hallaron "cartuchos de dinamita desperdigados entre unas rocas", que estaban "en muy malas condiciones". Además, ha recordado que el director facultativo de la explotación, que ayer compareció como testigo, les acompañó durante toda la inspección y que cuando encontraron las bolsas de dinamita "se mostró sorprendido de que eso apareciera".
Un testigo asegura haber visto a una etarra en el metro
El particular Antonio Beamonte, testigo de parte de la Asociación Ayuda a las Víctimas del 11-M, ha indicado que la mañana del 11 de marzo de 2004 vio a la integrante de la banda terrorista ETA Josune Oña en la línea 9 del metro de Madrid.