'El Egipcio' defiende que la voz grabada en Italia que se atribuía el 11-M no es la suya
Bouharrat justifica la aparición de fotos suyas en Leganés y los sobrinos de Belhadj niegan que su tío pertenezca a Al Qaeda
MADRID Actualizado: GuardarTal y como hizo el primer día de juicio, el presunto ideólogo del 11-M, Rabei Osman El Sayed, Mohamed El Egipcio, ha condenado "rotundamente" la masacre de Madrid. A diferencia de la vez anterior, el procesado ha reconocido que comentó las noticias que vio en televisión sobre los atentados con un amigo afincado en Bélgica, Mourad Chabarou. Esta circunstancia, a su juicio, no le implica en la masacre.
"Soy un ser humano normal y no tengo nada que ver con ese atentado terrorista", ha insistido El Egipcio, para quien la fiscal pide 38.656 años de cárcel.
Además, ha defendido que las conversaciones grabadas por la Policía italiana en las que supuestamente se atribuye la autoría del 11-M no se corresponden con su voz y que las traducciones son defectuosas en un 80%.
En esas conversaciones el presunto terrorista aseguraba supuestamente que el 11-M "fue todo idea mía, me costó mucha paciencia y mucho estudio". Reconocía que el atentado fue un "proyecto" suyo que "me llevó dos años y medio" y "los que murieron son mártires y mis queridísimos hermanos".
El Papa como ejemplo
Respecto a las conversaciones con su amigo Mourad en las que hablaba de los atentados, El Egipcio considera que se habían malinterpretado y puso como ejemplo, pidiendo insistentemente que no le malinterpretaran, lo que le ocurrió el pasado año al Papa Benedicto XVI al hablar sobre el Islam en una conferencia. En este sentido, ha recordado que tras pedir disculpas todo se olvidó y no pasó nada, porque se entendió que se habían malinterpretado sus palabras.
El Egipcio ha dicho que supuso un shock ver las imágenes de "sus amigos de Madrid", calificativo que empleó en la conversación con Mourad, como Serhane Ben Abdelmajid, 'El Tunecino', muerto en Leganés, o Fouad El Morabit, acusado que se enfrenta a una petición de doce años de cárcel, y que 'El Egipcio', según declaró, creyó que también había fallecido en Leganés cuando vio su fotografía en la televisión.
Bouharrat no admite ninguna acusación
Posteriormente compareció el presunto colaborador de la célula que perpetró el 11-M Mohamed Bouharrat, quien ha explicado que unas fotos suyas aparecidas entre los escombros del piso de Leganés llegaron allí porque se las dejó en el coche de un argelino que conocía a Jamal Ahmidad, 'El Chino', muerto en la explosión de esa vivienda.
Bouharrat, que se enfrenta a una petición fiscal de doce años de cárcel, ha negado además que se encargara de captar a nuevos miembros para la célula terrorista, así como de recopilar información sobre posibles objetivos contra los que cometer acciones criminales.
Los malos tratos de los hermanos Moussaten
Los siguientes en declarar fueron los hermanos Mohamed y Brahim Moussaten, sobrinos de uno de los supuestos ideólogos del 11-M, Youseff Belhadj, quienes alegaron haber sufrido malos tratos por parte de la Policía para tratar de justificar sus declaraciones incriminatorias contra su tío.
De este modo, Mohamed Moussaten ha negado que Belhadj le hubiera dicho que "le parecía poco" lo que había pasado en los atentados de Madrid, mientras que Brahim ha destacado que "si supiera que alguien de mi familia estuviera implicado dejaría de ser mi familia".
Mañana continúa el interrogatorio
Mañana está previsto que continué el interrogatorio a Mahmoud Slimane que comenzó al final de la sesión de la tarde y, según han informado fuentes jurídicas, podría darse también a conocer otro avance del nuevo análisis de los explosivos empleados el 11-M en el que, esta vez, se detallarían las cantidades de los componentes químicos detectados en cada escenario de los atentados.
No obstante, las conclusiones de este análisis no se conocerán hasta que el juicio entre en la fase pericial y precisamente hoy, uno de los ocho peritos (dos de la guardia civil, dos de la policía y cuatro propuestos por las acusaciones y las defensas) fue recusado por una de las acusaciones por ser el vicepresidente de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), Gabriel Moris.
En el incidente de recusación, que el tribunal resolverá mañana o pasado, el abogado de la acusación particular Gonzalo Boye pide que se aparte a Moris de este análisis por ser víctima directa del 11-M, su hijo murió en la explosión de uno de los trenes.