Zapatero y Rajoy reeditan en el Congreso su falta de sintonía sobre terrorismo
Rajoy asegura que "si es para cumplir con su deber y perseguir a ETA, siempre podrá contar con el apoyo del PP"
Actualizado:En uno de los enfrentamientos parlamentarios más duros de los últimos meses, Zapatero y Rajoy han vuelto a escenificar sus diferencias en la lucha contra el terrorismo. La primera sesión parlamentaria tras el atentado de ETA del pasado 30 de diciembre no ha aportado variaciones significativas en las posturas de Gobierno y Partido Popular, aunque sí ha elevado el tono de los reproches mutuos.
El presidente del Gobierno ha aprovechado el Pleno del Congreso para expresar su intención de trabajar "por la constitución de un gran consenso democrático contra el terrorismo" que aglutine a todos los partidos políticos. Así, ha anunciado que, en los próximos días, convocará una reunión del Pacto Antiterrorista -suscrito en su día con el PP- para evaluar la situación de la lucha antiterrorista y debatir las "posibilidades y objetivos" de ese "gran consenso" contra ETA.
Pero será diferente, ya que esa reunión no sólo incorporará al PP, sino al resto de partidos democráticos, asociaciones "sociales y cívicas" representativas e incluso a representantes de los inmigrantes que viven en España. "Es la hora de abrir paso a un consenso democrático aún más amplio", ha dicho el jefe del Ejecutivo para expresar un deseo: "Espero que todos sepamos estar a la altura que las circunstancias exigen".
El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha rechazado la invitación a ampliar el consenso porque, ha sostenido, no puede sumarse a un "acuerdo que no pretenda derrotar a ETA" y en el que "figuren todos los defensores de Batasuna".
"Si es para cumplir con su deber y perseguir a ETA, siempre podrá contar con el apoyo del PP", ha prometido Rajoy, argumentando que su partido será el "único aliado fiable" si "las cosas se ponen feas".
"Claro error"
Zapatero, que ha recordado el derecho de todos los presidentes de la democracia para acabar "con el terror", ha reconocido "el claro error" que cometió "ante todos los ciudadanos españoles" al pronunciar la frase en la que aseguró, un día antes del atentado del 30 de diciembre, que "estábamos mejor que hace un año".
El presidente ha defendido que en todo este tiempo ha "mantenido los ejes fundamentales de la lucha antiterrorista", ya sea en el aspecto judicial o policial. De igual forma, ha subrayado que siempre he tratado de combatir el terrorismo "sin pagar precio político alguno".
"ETA sabe que violencia terrorista y diálogo no son términos compatibles. Con violencia no hay diálogo", ha remarcado. "Nunca habrá diálogo con violencia ni con intentos de perpetuar la violencia". Ello no evita que su Gobierno "ha hecho, hace y hará" todo cuanto esté en su mano para buscar "los caminos de la paz definitiva, con respeto a las reglas del estado de Derecho y la fidelidad a la Constitución y a la Ley".
En este sentido, Zapatero ha expresado su "más profundo agradecimiento" por el apoyo recibido por la mayor parte de la Cámara, "en especial del PNV".
Críticas de Rajoy
El líder de la oposición le ha pedido que no intente utilizarle como "coartada" y le ha reclamado que demuestre una "voluntad inequívoca de rectificar" en política antiterrorista.
Tras preguntarse si Zapatero "es fiable" y su palabra "tiene valor", Rajoy ha planteado que el jefe del Gobierno deberá hacer "gestos" que permitan "confiar" en él, como que "proclame que se ha roto la relación con ETA", que revoque "la autorización que el pleno le concedió para dialogar con ETA" y vuelva a colocar a Batasuna en la "ilegalidad real".
Para Rajoy, todo el proceso tras el alto el fuego ha sido un "error". Y ha enumerado los que, a su juicio, son los fallos más remarcables: la imprudencia de no prever que la "aventura" podía salir mal y costar vidas; pensar que el terrorismo se resuelve mediante la negociación y renunciar a la desaparición de ETA. En cuarto lugar ha acusado a Zapatero de "jactancia", que ha definido como "esa presunción que le lleva a imaginar que las cosas funcionarán mejor porque usted está presente".
Tono duro de Zapatero
Durante la contrarréplica, ya en un tono muy duro, Zapatero ha lamentado no haber recibido durante los últimos meses el respaldo del principal partido de la oposición en la lucha contra ETA.
Aún así, ha lanzado una invitación final a Rajoy: "A pesar de las múltiples y duras diferencias", de "las acusaciones graves y en buena medida hipócritas, es mucho más lo que nos une que lo que nos separa", ha precisado. "Por mi parte doy por zanjada toda la diatriba, discusión, polémica, descalificaciones e insultos que he recibido si eso sirve para lograr el fin que merece España, la defensa de la vida, la paz y la libertad".