El juez Pedraz vuelve a contradecir a Garzón y excarcela a tres etarras
Garzón alertó del riesgo de fuga pero Pedraz sostiene que no hay pruebas para acusarles de colaborar en la muerte de Giménez Abad
Actualizado: GuardarEl juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha vuelto hoy a decretar libertad provisional para los etarras Ainara Esteran, Aitor Lorente y David Pla, acusados de asesinar en mayo de 2001 al senador del PP Manuel Giménez Abad. Esta decisión contradice la de su compañero Baltasar Garzón quien a su vez, mientras Pedraz se encontraba de vacaciones, revocó la decisión de éste de excarcelar a los imputados.
Pedraz, titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 y encargado de instruir la causa contra los tres etarras, argumenta en un auto que, "pese a lo considerado en el auto" del 25 de julio por Garzón, no existen "motivos bastantes para creer responsables" del asesinato a los imputados, acusados de suministrar información a la dirección de ETA para cometer el atentado.
A pesar de que Garzón acordase en su auto la práctica de diez diligencias, subraya Pedraz, este hecho indica que han sido ordenadas "para determinar si existen motivos bastantes" para la acusación, "de lo que se deduce que no están constatados". También argumenta que no se cumplen los requisitos legales para mantener a los etarras en prisión, ya que, en su opinión, no existe riesgo de fuga ni de reincidencia. Según Pedraz, tampoco hay peligro de que los acusados oculten, alteren o destruyan pruebas, ni de que actúen contra bienes jurídicos de la víctima.
Visiones contradictorias
La excarcelación de los tres etarras decretada hoy por Pedraz contradice la decisión tomada el pasado 25 de julio por Garzón, quien a su vez, a instancias de la Fiscalía, revocó el auto dictado por su compañero el día 14 de ese mismo mes, en el que archivaba la investigación abierta contra los etarras. Garzón tomó esta decisión mientras sustituía a Pedraz al frente del Juzgado Central de Instrucción número 1, evitando así la excarcelación de Pla y Lorente, prevista para el mismo día 25 de julio, al haber terminado ambos de cumplir condena por otra causa.
Al contrario que Pedraz, Garzón consideraba necesario el ingreso en prisión provisional de los tres terroristas porque, "de no hacerlo así, se puede correr el riesgo, más que evidente, de que (...) puedan sustraerse en forma inmediata o próxima a la acción de la Justicia ante la gravedad de la imputación (asesinato terrorista)".
Según Garzón, "pese a la exhaustiva documentación" desplegada por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 para acordar la libertad de los imputados, "en el momento actual, y a la vista de las circunstancias y hechos indiciariamente acreditados, la prisión de aquellos era la opción más adecuada, al menos mientras se practiquen en forma urgente las diligencias que, necesariamente deben llevarse a cabo para garantizar una correcta instrucción de la causa".