
Cuatro de cada diez niñas gaditanas no se vacuna contra el virus del papiloma
Solo el 62,8% de las adolescentes de la provincia recibe las dos dosis de este fármaco que previene del cáncer de cuello de útero
Actualizado: GuardarSólo el 62,8% de las adolescentes gaditanas de 14 años recibe las dosis necesarias de la vacuna contra el virus del papiloma humano (HPV) -que previene contra el cáncer de cuello de útero-, lo que supone que una de cada cuatro o bien decide no vacunarse o bien no completa correctamente el tratamiento (se necesitan dos dosis), según los datos recogido del Distrito de Atención Primaria Bahía de Cádiz-La Janda, correspondientes al año 2014. Unas 1842 niñas fueros vacunadas de un total de 2468 nacidas en el año 2000.
La vacuna contra el virus del papiloma humano -que protege del 98% de casos de cáncer de cuello uterino provocados por el HPV de alto riesgo (tipos 16 y 18)- se incluyó en el calendario oficial de vacunación de Cádiz en 2009.
Hasta finales de 2014, el fármaco estaba pensado para las niñas de 14 años que debían repetir la dosis al mes de haberse vacunado y ponerse otra al medio año. Sin embargo, en 2015, el Servicio Andaluz de Salud decidió reducir la dosis en dos vacunas- una al momento y otra a los seis meses-, «Hay estudios que han demostrado que cuando tu administras la vacuna entre 9 y 14 años y pones dos dosis incrementas mas la inmunidad que cuando pones la vacuna entre 15 y 26 años», subraya Isabel M. Ramírez Polo, médico de familia de la UGC Cayetano Roldan, en San Fernando. Isabel realizó su tesis doctoral sobre el HPV y su relación con el cáncer de cuello con el doctor Colombo Aragón. En la actualidad, coordina el Proceso de Cáncer de Cérvix y Útero en Atención Primaria del distrito Cadiz, y forma parte de grupo evaluador junto al Profesor Torrejón Cardoso y el doctor Martínez Parra.
Eficaz, segura y efectiva
El virus del papiloma humano es, según Isabel M. Ramírez Polo, una de las enfermedades de transmisión sexual más frecuentes hoy en día. El 80% y 85% de la población mundial está en contacto con el HPV. La facultativa afirma que cuatro de cada diez mujeres han estado en contacto con el virus al año de iniciar las relaciones sexuales y seis de cada diez a los dos años. Se trata de una patología que afecta a la piel y las mucosas y que puede producir desde lesiones banales -en forma de verrugas- hasta derivar en un tumor. La doctora Ramírez recuerda que «la mayoría de infecciones producidas por el HPV no causan ningún síntoma y se resuelven por sí solas», pero que conviene tomar medidas para evitar el contagio ya que «algunas variantes pueden causar cáncer de cérvix».
Isabel M. Ramírez resalta que el mejor método para evitar el contagio del virus del papiloma humano -hay mayor riesgo en los primeros años del inicio de relaciones sexuales- es tomar precauciones a la hora de practicar sexo, mediante el uso del preservativo. «La vacunación ofrece una medida preventiva adicional para evitar los efectos más graves de la infección por este virus y por tanto del cáncer de cérvix, pero no sustituye a las medidas anteriores», señala. «El estar en contacto con el virus no significa que se vaya a padecer la infección, de hecho la mayoría de las veces nuestra inmunidad impide que la infección desarrolle y otras veces aunque la infección progrese, nuestra inmunidad la detiene, es decir, el HPV produce el casi 100% de los canceres de cérvix. El virus de papiloma humano es condición necesaria para que se produzca el cáncer, pero no suficiente», matiza la doctora Isabel a lo que añade que « hacen falta factores que faciliten su progresión, que regulen la inmunidad, ambientales como el tabaco, la multiparidad, los estrógenos. Realmente no conocemos el mecanismo exacto de porqué a veces progresa la infección y produce lesiones precancerosas y cancerosas en el cérvix y otras no».
El cáncer de cuello es el cuarto en frecuencia de la mujer por detrás de cáncer de mama, pulmón y colon. Unas 2100 mujeres son diagnosticadas en España al año y unas dos mujeres mueren al día por esta causa. Por ello, la doctora Ramírez recuerda que tenemos una vacuna que es eficaz en el 98% y 100% de los casos, que dota de alta inmunidad, segura y efectiva. «No hay datos de alerta de seguridad ni de la Agencia Europea del medicamento ni de la FDA que es su equivalente americano». Además, añade que en los últimos resultados presentados por el grupo de Australia, uno de los pioneros en usar la vacuna, se demuestra que en las vacunadas han disminuido las lesiones precancerosas del cérvix y ha reducido de forma muy significativa la prevalencia de la infección.
Isabel M. Ramírez se muestra optimista ante los resultados positivos de la vacuna. «Debemos animar a todas las familias a que sus hijas de 14 años vayan a su centro de salud y se la pongan. El sistema sanitario la ofrece gratuitamente a chicas de 14 años. Cuando las madres me preguntan que si yo se la pondría a mi hija, yo siempre le contesto si eso mismo se lo preguntaron al pediatra antes de ponerle las primeras vacunas o si se lo preguntarían si existiese una vacuna contra el cáncer de mama», aconseja.