Crece el malestar en los astilleros gaditanos ante la posible pérdida del contrato de los petroleros
Los portavoces sindicales de las tres factorías mantienen una reunión con la presidenta de Diputación para abordar la situación de crísis en la que se encuentran asumidas las plantas gaditanas
Actualizado: GuardarCrece la preocupación en los astilleros gaditanos ante la perdida del contrato de los petroleros. La presidenta de Diputación, Irene García ha mantenido esta mañana un encuentro con los representantes sindicales de las tres factorías de la Bahía que le han transmitido los mensajes negativos que vienen de Madrid en relación a la construcción de los seis barcos petroleros entre la factoría de Puerto Real y la gallega de Ferrol.
Los representantes de los trabajadores han reconocido que no tienen datos oficiales sobre lo que ocurrirá el próximo 28 de julio en el Consejo de Administración de la SEPI, órgano del Ministerio de Hacienda que controla a las empresas públicas del país.
El pasado miércoles el Consejo de Administración de Navantia evaluó los pormenores de este contrato con el grupo vasco IBAIZABAL y aunque reconoció su complejidad se mantuvo firme en su viabilidad, sin embargo será la SEPI la que el próximo martes emita el veredicto definitivo.
No hay que olvidar que un informe técnico reconoce por un lado la escasa rentabilidad de este contrato y el alto riesgo que supone para la empresa pública. De hecho, la presidenta de Diputación, Irene García ha exigido al ministro Montoro que de detalles sobre este estudio y aclare en qué situación se encuentra la firma de este contrato clave para el desarrollo industrial de la Bahía.
Tanto la presidenta de Diputación como los portavoces sindicales han coincidido en señalar que los astilleros no pueden vivir de incertidumbres sino que deben contar con un plan industrial que garantice su existencia. García ha aprovechado la ocasión para criticar los anuncios de carga de trabajo que ha hecho el PP en vísperas de elecciones.
Por último, tanto los sindicatos como la presidenta admiten que el problema de los astilleros «va más allá del contrato de los petroleros ya que no hay garantizada su futura carga de trabajo en ningún aspecto».
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