Costas advierte del riesgo de ampliar las barbacoas del Carranza a toda la playa
La ampliación que promueve el nuevo Ayuntamiento supone incrementar la carga de materia orgánica que se vierte en la zona
Actualizado:El Ayuntamiento de Cádiz no puede actuar de forma unilateral en la ampliación del terreno para celebrar las tradicionales barbacoas del Trofeo Carranza. El anuncio del concejal de Participación Ciudadana, Adrián Martínez de Pinillos, de eliminar las restricciones de los últimos años y extender a toda la playa la zona de ocio nocturno no es viable sin un informe vinculante de la Demarcación de Costas.
El consistorio debe cursar por escrito la solicitud y justificar los motivos que le llevan ahora a ampliar el espacio de las barbacoas. El edil se mostró a favor el pasado viernes tras la reunión de la Comisión de Gobierno de promover la barra libre en la celebración de las barbacoas y declarar apta para el festejo desde La Victoria a La Caleta.
El anuncio ha provocado una cascada de reacciones justo en un momento en el que la fiesta empezaba a languidecer gracias a las cortapisas impuestas por la Administración durante los últimos cinco años. Lo que empezó como una fiesta familiar para festejar el Trofeo Carranza terminó en un macrobotellón hasta el amanecer. Al final fue el mismo Ayuntamiento, entonces gobernado por el PP, el que tuvo que poner puertas al campo y acotar la zona de celebración hasta reducirla a la mínima expresión. Así, de las 250.000 personas que acudieron a la cita en 2005, cifra récord, en 2014 solo se contabilizaron 31.000.
El jefe de la Demarcación, Patricio Poullet, ha declarado a LA VOZ que la medida no es competencia exclusiva del ayuntamiento, sino que salpica a la Junta y a la propia Demarcación, que tiene que emitir el correspondiente informe técnico aprobando o desautorizando la solicitud. De momento, nadie del consistorio se ha puesto en contacto con Costas para abordar este tema. No obstante, este periódico ha podido saber que este miércoles mantendrán un encuentro representantes de la Corporación municipal con técnicos de la Demarcación.
Poullet aclaró al respecto que el Ayuntamiento debe justificar en su solicitud los motivos que llevan a dicha ampliación, así como los medios técnicos con los que cuenta para garantizar la seguridad y limpieza de la playa y poder permitir con ello el equilibrio de usos, es decir, los siete kilómetros de playa que pretende abrir el ayuntamiento a la celebración de las barbacoas deben combinar y garantizar sin problemas el ocio nocturno y el baño matinal, amén del descanso.
Costas, no obstante, reconoce que la medida que persigue ahora el nuevo equipo de gobierno supone una fuerte carga de materia orgánica a la zona de dominio público. Pese a todo, la Demarcación está abierta a estudiar la petición.
Pérdidad de la bandera azul
El que ya se ha pronunciado al respecto ha sido el delegado provincial de medio Ambiente, Federico Fernández, que ha reconoció que la medida supone un paso atrás. Precisamente, Fernández fue responsable de Costas en los momentos álgidos de la barbacoa del Trofeo Carranza. De hecho, la situación empezó a cambiar en 2010 cuando se practicaron unos análisis a la arena de la playa y al estado del agua tras las celebración de la fiesta.
El resultado de las muestras impidió a Cádiz en 2011 contar con el distintivo de la bandera azul. Por primera vez en 23 años, la ciudad perdía ese símbolo de calidad. Fue entonces cuando Ayuntamiento y Demarcación de Costas iniciaron una cruzada para rebajar el impacto de las barbacoas. Poco a poco se ha ido logrando.
El Ayuntamiento de Cádiz acaba de iniciar una nueva cruzada con su anuncio, pero requiere de la autorización de la Junta de Andalucía. Además, el visto bueno de la Administración andaluza necesita de un informe favorable previo de la Demarcación de Costas Andalucía-Atlántico. De momento, ni la delegación provincial de Medio Ambiente ni la Demarcación de Costas tienen conocimiento oficial de la propuesta que maneja el consistorio gaditano para el próximo 15 de agosto.
Desde la Junta han señalado que han recibido con «cierta sorpresa» la noticia, máxime teniendo en cuenta de que las tres administraciones con competencias en este asunto -Ayuntamiento, Junta y Costas- habían llegado en los últimos años «a un equilibrio entre el respeto al entorno y la celebración de este evento», con lo que les parece «cuanto menos un paso atrás».
En cualquier caso, el Ayuntamiento puede realizar este trámite, si bien necesita de autorización expresa de la Junta de Andalucía. Explican las citadas fuentes que la celebración de las barbacoas se venía incluyendo hasta ahora en el Plan de Playas que autorizaba la Administración andaluza antes del verano, cuestión que ha cambiado con el nuevo reglamento de Costas.
Evento de interés local
l
Así, el Ayuntamiento debe tramitar ahora una catalogación especial de las barbacoas como «evento de interés local con repercusión turística», en el que debe explicarse cómo se van a poner en marcha los dispositivos pertinentes, entre ellos el de limpieza.
Posteriormente, Costas debe emitir un informe y, en base al mismo, la Junta estudiaría si cumple o no los requisitos necesarios para proceder a su autorización.
Desde la Delegación Territorial consideran «una pena» que el trabajo realizado a lo largo de estos años «se deje atrás y se reabra un debate que parecía cerrado con todo el mundo satisfecho».
Por su parte, el jefe de la Demarcación de Costas Andalucía-Atlántico, Patricio Poullet, incidió en que, una vez recibida la propuesta formal, Costas debe estudiarla y emitir un informe favorable, siendo éste un requisito indispensable para obtener la autorización expresa de la Junta de Andalucía. En este sentido indicó que hay tiempo hasta el 15 de agosto para emitir una resolución.