Inversores, interesados en hacer balnearios en salinas de Puerto Real y San Fernando
Los beneficios del fango y la sal, claves en estos negocios
Actualizado: GuardarEn los últimos tiempos el uso de la sal para cocinar ha sido cuestionada porque en algunas personas con problemas de tensión arterial o de riñón, su consumo no es recomendable ya que atrae agua y puede producir retenciones de líquido, edemas o hinchazones.
La sal en exceso, como cualquier otro alimento que se tome de forma exagerada, es mala. Pero, según indican algunos expertos, si se toma de la forma adecuada, es un alimento básico para nuestro organismo. Se trata del principal proveedor de oligoelementos y minerales, y proporciona al cuerpo el cloro y sodio necesarios para el equilibrio hídrico.
Además, lo mejor de una sal es su estado más puro posible. Y eso es lo que se persigue, siguiendo obviamente los controles necesarios, en las salinas.
Pues bien, en este sentido, la sal virgen se ha convertido en un atractivo para el sector farmacéutico y cosmético. Así por ejemplo se comercializa como sales de baño para pacientes que sufren de enfermedades como la psoriasis. E incluso, algunos oncólogos las han recomendado para pacientes que siguen tratamientos de quimioterapias ya que por osmosis exterior sirva para limpiar de toxinas el organismo.
Y un baño en la propia salina es también ya un negocio. Así por ejemplo, en el Centro de Recursos Ambientales, en las salinas de Chiclana, durante el verano se ofrecen baños de manos y pies en sal. El agua que llega a los tajos tiene también gran cantidad de magnesio y sulfato, y otros elementos como hierro, zinc o yodo, muy beneficiosos para la piel, para su remineralización. Está indicado para alergias, inflamaciones articulares, entre otras dolencias. Y también para tratar enfermedades inflamatorias como esguinces, artrosis, tendinitis, reumatismos, etc.
Además, desde hace años, el atractivo de las salinas tradicionales seduce a inversores. De ahí que haya empresarios interesados en hacer balnearios naturales en la zona de marismas de Puerto Real y San Fernando. De momento, en colaboración con la UCA, se encuentran analizando los beneficios de estas sales y también de fangos como el de La Cachucha en Puerto Real, eirgido en el balnerario natural de la Bahía desde hace años.
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