Pedro Pacheco, con problemas para pagar los honorarios de sus abogados

El letrado de Pedro Pacheco, Aníbal Álvarez, ha anunciado a través de la agencia Europa Press que abandona la defensa de su cliente porque la familia no puede hacer frente a sus honorarios, que, entre otras cuestiones, implican desplazamientos a Puerto III cada quince días desde Madrid, donde se ubica el bufete especializado en el que trabaja.

Álvarez sí mantendrá la relación laboral con el exlíder del PSA para concluir la tramitación del indulto solicitado al Consejo de Ministros y la petición de nulidad del 'caso asesores' ante el Tribunal Supremo; los dos frentes judiciales iniciados para tratar de revocar la condena de cinco años de cárcel que pesa sobre Pacheco.

La renuncia de este letrado se suma a la que ya hiciera Felipe Meléndez, quien fuera abogado del exalcalde cuando éste inició su particular guerra en los tribunales contra su rival Pilar Sánchez.

Una pugna de la que salió victoriosa la exregidora socialista porque fue declarada inocente de la denuncia que formuló contra ella por enchufismo sistemático. Mientras que Pacheco sí fue condenado por colocar a dos compañeros en sendas empresas municipales, que cobraron sin realizar trabajo alguno.

Meléndez confirmó que abandonaba la defensa de Pacheco a las puertas de arrancar la vista oral contra Pilar Sánchez. El letrado no quiso aclarar los motivos, pero este periódico pudo conocer a través de fuentes cercanas a ambos que el exalcalde tenía problemas para abonar los honorarios.

La casa de Costa Ballena, en venta

Aníbal Álvarez ha explicado que la familia del exalcalde busca liquidez a través de la venta de la casa que tienen en Costa Ballena. Pero esa propiedad está embargada por orden de la Audiencia provincial para satisfacer la responsabilidad civil de más de 200.000 euros derivada de la condena por el ‘caso asesores’.

Sobre el primer mes que Pacheco ya ha cumplido en prisión, el letrado explica su cliente lo «lleva bien» y que está matriculado en Historia del Arte por la UNED porque ésta era «su asignatura pendiente».

El exalcalde le ha contado que tiene «muy buena relación» con sus compañeros de módulo y de celda. Asegura, además, que está «bien atendido» y que no tiene quejas por la comida ni de ningún otro tipo.