Los 88 peldaños de la gente feliz

Peldaño 7: Esto explica por qué todo sufrimiento procede de un miedo

En este séptimo capítulo o peldaño de «Los 88 peldaños de la gente feliz» te explico algunas de las consecuencias del miedo

Detrás de sufrimiento siempre hay miedo, según explica Anxo Pérez
Anxo Pérez

Anxo Pérez

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Te voy a decir algo que te parecerá una barbaridad . Al menos a mí me lo pareció la primera vez que lo escuché. Hoy considero que es no una barbaridad, sino una revelación. Cada acción, de cada persona, en cada momento, hasta la más terrorífica que se te pueda ocurrir, parte de un deseo positivo : el de eliminar un miedo . Incluso el que roba o mata lo hace porque está buscando algo que él entiende que va a reducir o hacer desaparecer un miedo que él tiene, y por tanto considera que está buscando algo que es bueno (para él), por supuesto eligiendo el peor de los caminos para conseguirlo (fruto de la ignorancia). Y mientras no se sane el miedo que él percibe, no se anulará el peligro que él supone.

¿Qué hay detrás de cada tentáculo del ego ? Siempre, siempre, siempre... un miedo .

– Tu entrenador te critica delante de los compañeros de equipo cuando tú eres el capitán. Te pones furioso y combates su opinión. ¿Cuál es tu miedo? El miedo a no ser respetado y a perder estatus en el equipo (y por tanto te rebelas igual que lo haría un león que cree está a punto de dejar de ser el rey de la selva).

– Alguien te agrede (verbal o físicamente). Tú sientes rabia de manera instantánea y devuelves la agresión. ¿Cuál es tu miedo?

El miedo de ser pisado o avasallado por otro. Lo combates atacándolo de vuelta.

– Tu pareja se fija en otra persona en un bar. A ti te sobrecoge un ataque de celos y entras en cólera. ¿Cuál es tu miedo? El miedo de no ser querido o ser insuficiente para esa persona (y por tanto miedo al abandono). (La solución no está en evitar los celos, sino en averiguar qué ha hecho que llegaras al punto de temer el abandono.)

– Tu hijo adolescente te dice que quiere irse a estudiar al extranjero.

Tú sabes que es bueno para él, pero te puede la ansiedad y te niegas. ¿Cuál es tu miedo? El miedo a quedarte sola, a perder el control sobre él y a la incertidumbre: «¿Qué pasa si se queda allí a vivir y ya no lo veo tan a menudo?», te dices atormentada.

– Acabas de perder tu trabajo y te sumes en un mar de tristeza y preocupación . ¿Cuál es tu miedo? Miedo al «¿qué va a ser de mí?» en el futuro sin esto que acabo de perder en el presente.

Actúas con desesperación .

Ninguna de estas formas de actuar ha resuelto el problema.

¿Por qué? Porque todas se llevan a cabo desde el miedo . Esto representa la mayor paradoja de la historia (exagero, pero poco).

Actuamos con el fin de eliminar el miedo, y acto seguido tomamos concienzudamente el camino que produce el resultado diametralmente opuesto al que buscábamos: en lugar de eliminar el miedo, lo hemos perpetuado . No sólo no lo hemos combatido, sino que además, lo hemos hecho más grande.

#88PeldañosGenteFeliz

«Todo sufrimiento procede siempre de un miedo. La solución no está en combatir y matar el sufrimiento, sino en encontrar y sanar el miedo».

@Anxo

— Anxo, pero si gracias a ese miedo al «¿qué va a ser de mí?» cuando pierdo mi trabajo consigo reactivarme y ponerme a buscar un trabajo nuevo porque estoy desesperado, a lo mejor gracias a eso lo encuentro.

Por supuesto que puedes encontrar un trabajo nuevo en esas condiciones, pero que lo consigas es menos probable. ¿Por qué? Porque es una acción que parte desde el miedo, y el miedo no es empoderador, sino limitante. Cuando actúas desde el miedo no ves las cosas con mayor lucidez , sino con menos, no actúas con mayor poder, sino con mayor temor.

— ¿Desde dónde habría que actuar, entonces?

Desde el amor , esto es, desde la paz interior y desde la confianza de saber que todo se resuelve. Siempre. Hasta las cosas más graves, como la muerte de un ser querido, se acaban superando. Yo perdí a mi padre hace años y no voy con una losa por la vida que me impida vivir.

— Anxo, ¿y si sí tuvieras esa losa por no superar esa pérdida?

Entonces sería consecuencia de un miedo no sanado.

— Y ¿cómo se aprende a sanarlo?

Muy fácil. Leyendo el peldaño siguiente... (No muerde, así que no tengas MIEDO.)

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación