Estrés

El estrés es un sentimiento de tensión que puede ser físico o emocional que proviene de una situación o pensamiento que provoca sensaciones de frustración , furia o nervios. En general, pequeños episodios de estrés pueden ser positivos ya que es una reacción del cuerpo ante un desafío o una demanda que ayuda a evitar el peligro. Sin embargo, cuando el estrés es permanente se convierte en un problema con consecuencias para la salud. Así las cosas, puede haber un estrés puntual como respuesta a una situación, un estrés permanente ante una situación también constante y un estrés permanente que se mantiene una vez desaparecido el factor estresante, en cuyo caso pasa a convertirse en ansiedad.

Todas las personas padecen estrés en algún momento de su vida y lo habitual es que sirva como acicate y se supere con normalidad por lo que no tiene por qué ser nada preocupante. Sin embargo, la falta de control ante situaciones de estrés o que se convierta en algo recurrente y continuo sí puede convertirse en un problema .

El estrés va unido a la hormona del cortisol que se produce en las glándulas suprarrenales, ubicadas en la parte superior de los riñones, y actúa como neurotransmisor en el cerebro para enfrentarse a situaciones difíciles. Mientras los niveles de cortisol estén equilibrados, los órganos y el sistema nervioso también se mantienen bien. Sin embargo, cuando se elevan los niveles de cortisol se pueden producir efectos negativos en las funciones de las células del cuerpo provocando efectos negativos en todo el cuerpo. Conocer los niveles de cortisol es muy sencillo ya que puede hacerse mediante un análisis de sangre haciendo una prueba dos veces al día, pero también con una prueba de orina, que se recolecta durante todo el día, o de saliva, frotando un hisopo por la tarde, cuando los niveles suelen estar más bajos.

Para tratar el estrés, es necesario acudir al médico pero puede mejorarse su control y llegar a evitarse incorporando una serie de hábitos.

- Relaciones sociales : mantener relaciones sana y de calidad con la familia y los amigos

- Deporte : buscar tiempo para practicar una actividad física es ideal para relajarse

- Meditación : aprender técnicas de relajación, yoga o respiraciones profunda puede ayudar

- Estimulantes : evitar el alcohol, el tabaco o la cafeína ayuda a controlar el estrés