Verano activo, acuático y energizante: cómo seguir en forma en vacaciones
Mantener la actividad física en vacaciones y probar deportes a los que cuesta más acceder durante el resto del año mejor el bienestar físico y mental
Ejercitario
Si quieres hacer deporte y te encanta la música y bailar, el Zumba es una opción perfecta. Se trata de un programa de acondicionamiento creado a mediados de los 90 por el bailarín y coreógrafo colombiano Alberto Pérez, conocido como ‘Beto’ Pérez. Su nombre se inspira en la vibración que el baile provoca en el cuerpo al practicar esta disciplina, de ahí que su creador le llamara Zumba, creando una marca registrada que se hizo muy popular a lo largo y ancho del mundo durante la primera década de los 2000. En todos los gimnasios se podía encontrar Zumba aunque no siempre llevará ese nombre.
Esta disciplina, si bien no vive sus días de máximo esplendor, sí sigue siendo muy popular gracias a su versatilidad y a la buena energía que da la música en las sesiones colectivas que suelen ser ritmos latinoamericanos como la salsa, el merengue, la cumbia, la bachata y, cada vez más, el reguetón. El objetivo es hacer una clase aeróbica divertida y dinámica que mejore la condición física general así como la flexibilidad, la resistencia y la coordinación .
Se organiza en sesiones de una hora dividas en tres partes. Una primera de unos diez minutos de calentamiento en el que se hacen variaciones de extremidades, pecho y espalda con ejercicios de tonificación. La segunda parte y principal, ocupa unos 45 minutos con series de pasos combinados de diferentes géneros musicales inspirados en los bailes latinos. Movimientos de tonificación en un ambiente distendido con repeticiones en los estribillos de modo que se puedan memorizar las ‘ coreografías ’ para ir aumentando la intensidad. Los últimos cinco minutos, que suelen coincidir con el último o los dos últimos temas musicales sirven para la vuelta a la calma y el estiramiento estático, reduciendo la frecuencia cardiaca mediante técnicas de respiración.
Mejora el estado de forma general.
Libera endorfinas proporcionando sensación de felicidad y disminuyendo el estrés.
Mejora la coordinación y la conciencia espacial.
Aumenta la resistencia.
Tonifica los músculos.
Favorece la socialización.
Aumenta la flexibilidad.
Riesgo de lesiones, especialmente esguinces.
Necesita compromiso: de la intensidad individual depende el resultado.
Las clases pueden variar bastante según quién las dirija.
No apto para quien no le guste el constante movimiento o estar rodeado de gente
Se recomienda consultar al médico en los casos de obesidad antes de iniciar esta actividad.