Nutrición
No todos los omega-3 de los alimentos son iguales: diferencias entre el de origen animal y el vegetal
Las propiedades atribuibles a los omega 3 de origen marino son sensiblemente superiores a los de origen vegetal
Desde épocas remotas, los productos del mar han sido uno de los componentes principales de la dieta humana. Fueron los griegos los primeros en filetear el pescado y en descubrir las ostras. Se trata de uno de los alimentos más sanos y nutritivos de cuantos la naturaleza ofrece. En España y en regiones como Galicia el consumo de productos pesqueros constituye una tradición que nos sitúa entre los primeros países del mundo, detrás de Japón y Dinamarca.
Desde 1985, «Año de los Productos Marinos» se ha hecho especial hincapié en el valor nutricional de los productos pesqueros debido a las numerosas publicaciones científicas en los campos de la Nutrición y la Salud que demuestran los efectos beneficiosos del consumo de pescado.
Los productos del mar son una fuente excelente de proteínas, vitaminas y minerales esenciales para nuestra salud. Asimismo, los descubrimientos científicos relacionados con los posibles efectos beneficiosos de la ingesta de dos ácidos grasos poliinsaturados de la familia Omega-3 (DHA y EPA) presentes en los productos del mar y no en otros alimentos, han permitido establecer los importantes beneficios nutricionales de la ingesta de productos pesqueros. Y es que no todos los ácidos grasos omega 3 son iguales: los ácidos grasos omega 3 puede ser de origen animal como ocurre con el EPA (ácido eicosapentanoico) y DHA (ácido docosahexanoico) pero también de origen vegetal como ocurre con el ácido linolénico (ALA) de las semillas de chía , nueces , soja, girasol o lino.
Todos son ácidos grasos esenciales que somos incapaces de sintetizar pero sus efectos no son iguales, ya que los beneficios atribuibles a los omega 3 de origen marino son sensiblemente superiores a los de origen vegetal, si bien cuando ingerimos los el ALA vegetal parece que somos capaces convertir una pequeña parte en DHA y EPA.
Razones para tomar omega 3 marino
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1. Puede mejorar y reducir la incidencia y síntomas de depresión.
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2. Puede reducir el riesgo de padecer Alzheimer o Parkinson.
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3. Puede mejorar el aprendizaje y función cognitiva en niños.
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4. Puede aumentar la fertilidad tanto en el hombre como la mujer.
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5. Favorece el desarrollo cerebral del bebé durante el embarazo.
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6. Puede aliviar los síntomas de psoriasis.
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7. Aumentan la saciedad y ayudan a controlar el peso.
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8. Disminuyen el riesgo de padecer degeneración macular.
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9. Regulan la presión arterial.
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10. Previenen la formación de trombos y coágulos sanguíneos.
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11. Disminuyen el riesgo de padecer infarto de miocardio, muerte súbita y arritmias.
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12. Disminuyen los triglicéridos en sangre.
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13. Aumentan el colesterol HDL o «bueno».
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14. Disminuyen el colesterol LDL o «malo».
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15. Ayudan a disminuir el consumo de antiinflamatorios, evitando sus efectos secundarios a largo plazo.
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16. Pueden prevenir la diabetes gestacional.
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17. Mejoran la función renal en pacientes diabéticos tipo 2.
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18. Mejoran los síntomas de la enfermedad de Crohn y el enfermedad inflamatoria intestinal.
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19. Previenen el cáncer de cólon y recto.
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20. Tienen un efecto protector en el cáncer de mama.
En definitiva, aun queda mucho que estudiar sobre el papel de los omega 3 y las dosis adecuadas a suministrar pero está claro que el poder antiinflamatorio, modulador del sistema inmunológico y preventivo de numerosas enfermedades convierten a estos ácidos grasos en aliados de nuestra salud, bien mediante el consumo de pescado, mariscos como el mejillón, alimentos enriouecidos o bien mediante el uso de suplementos.
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