Alimentos de temporada: las frutas y verduras que están mejor en abril

Fresa. Según los expertos de Soy de temporada, los fresales florecen desde finales de invierno hasta comienzos del verano, y sus frutos maduran durante toda la primavera hasta finales de verano, por lo que los fresones y las fresas comienzan a aparecer en el mes de abril. Son consideradas como las frutas afrodisíaca por excelencia, no sólo por su color rojo pasión y su forma de corazón, sino porque sus propiedades favorecen la circulación sanguínea y el deseo carnal. Limón. El limón puede encontrarse desde los meses de otoño hasta ya entrado el verano. Aunque a veces pueda tener pequeñas manchitas marrones en su cáscara, estas no afectan a su sabor, pero sí se deben descartar aquellos que parezcan deshidratados o blandos. Es una fruta muy rica en vitamina C y por sus propiedades antioxidantes y ácido cítrico Chufa. Este alimentos que se cultiva en invierno para que esté listo para tomar en verano, está repleto de propiedades beneficiosas para la salud: 232.225 mg de fósforo por cada 100 gramos de chufas, 519.2 mg de potasio y 69.54 mg de calcio por cada 100 gramos del alimento, según datos de la BEDCA. Níspero. Esta verdura de la familia de las ciruelas, manzanas o cerezas, entre otras frutas, tiene su momento óptimo de consumo en primavera y está cargada de vitamina A (218 ug por cada 100 gramos del producto), potasio (266 mg por cada 100 gramos de nísperos) y calcio (16 mg por cada 100 gramos del producto), según informan los expertos de la BEDCA. Maracuyá. De sabor ligeramente acídulo y muy aromática, la maracuyá está repleta de agua, siendo este su principal componente. Contiene una alta cantidad de hidratos de carbono por lo que su valor calórico es muy elevado. Papaya. La papaya es una fruta tropical de gran tamaño originaria de México y cultivada en varias regiones del mundo, como por ejemplo España, más concretamente en las Islas Canarias.Al ser una fruta de tipo carnoso tiene abundante agua, alrededor del 90 por ciento, tal y como informan los expertos de la BEDCA. Gracias a este elevado porcentaje en agua es un excelente diurético. Naranja. Las mejores estaciones para consumir las naranjas son otoño e invierno, aunque también pueden encontrarse durante la primavera. Se aprecia en la textura y sobre todo en la frescura y sabor cuándo una naranja está fuera de temporada, o peor, ha sido congelada. La naranja es uno de los productos que España más exporta y a la vez más importa. Calabacín. Con el buen tiempo llegan los primeros calabacines , por eso la temporada perfecta para consumirlos es el verano porque necesitan climas calurosos para crecer. Las flores de la planta también son comestibles y tienen un sabor muy delicado. Acedera. Esta verdura de hoja poco conocida (suele tener hebras de color rojiza) es muy usada en la medicina herbolaria, es una fuente rica en vitaminas C, ácido oxálico y bicarbonato de potasio. Piña. La piña es un alimento que fundamentalmente aporta hidratos de carbono, 13 gramos por cada 100 gramos de fruta, de lo cuáles, casi 10 son azúcares. Muy rica en vitaminas del grupo B, la piña también es una excelente fuente de vitamina C y aporta minerales como calcio, hierro, magnesio, manganeso, fósforo, potasio, sodio y zinc. Plátano. ¿Sabías que el 99,9% de los plátanos españoles se cultivan en Canarias y se recogen todo el año? En la península podemos encontrarlo únicamente en algunas plantaciones de la costa granadina. Es una fruta climatérica, lo que significa que sigue madurando después de haber sido recogida y entre sus propiedades destaca el potasio, las vitaminas B6, vitamina C y ácido fólico y es muy rica en fibra. Pomelo. El pomelo que consumimos en Europa es un híbrido de los cítricos cultivados desde hace milenios en China y sudeste asiático. Al igual que otros cítricos, la mejor época para su consumo es otoño e invierno. En los últimos años se está incrementando notablemente la producción de pomelos, principalmente en la costa mediterránea y Andalucía. Los principales usos son crudos, en mermeladas o postre. Acelga. La acelga es una verdura cultivada durante todo el año aunque la mejor época para su consumo va desde el final del otoño hasta el comienzo de la primavera, Además, es una verdura de muy bajo contenido calórico, rica en agua, fibra, vitaminas y minerales. Brócoli. La primavera no es la mejor época para comer brócolis dado que hasta marzo están en su momento óptimo de consumo, pero sí que pueden encontrarse en grandes supermercados. ¿Sabías que esta verdura se puede cocinar de muchas formas? Aunque su olor no sea agradable, sí que tiene muy buen gusto al paladar. Cebolla tierna. La cebolla se encuentra durante la mayor parte del año porque se almacena y se conserva bien, como el ajo. Existen algunos trucos para que este alimento no te haga llorar ni te piquen los ojos. Coliflor. Los meses más óptimos de consumir coliflor son los fríos, por lo que en primavera muy rara vez podrás encontrarlas de temporada. De hecho, de comprarlas en las temporadas cálidas, serán de pequeño tamaño y muy probablemente con el precio inflado. Este alimento es una buena fuente de energía, potasio y fósforo. ¡Y conocemos los trucos para que no huela al cocinarla! Espinaca. Las espinacas son una gran fuente de vitamina A, vitamina C, vitamina E, vitamina K y vitaminas del grupo B (B6, B2 y B1) y ácido fólico (vitamina B9), además de ser rica en potasio, lo que propicia la disminución de la presión arterial, y magnesio, necesario para el mantenimiento de la función muscular y nerviosa y el metabolismo energético. Espárrago. Los espárragos son ricos en vitaminas A, C, E, vitaminas del grupo B (B1, B2, B6) y vitamina K, ácido fólico, especialmente importante durante la gestación, minerales como el hierro, calcio, fósforo, sodio y antioxidantes (betacaroteno, el tocoferol y selenio), además de aportar fibra, un elemento a tener muy en cuenta en nuestra dieta. Tomate. Existen multitud de tomates , que se encuentran todo el año en la península, aunque su temporada natural es el verano. Es uno de los productos con mayor producción en invernadero. Los tomates madurados al sol del verano alcanzan un nivel de sabor y textura imposibles de superar. Además, existen muchas variedades distintas que corren el peligro de desaparecer por centrar la producción únicamente en las que mejor se venden Remolacha. La remolacha es un cultivo típico mediterráneo que se consume habitualmente cocida, en ensaladas, hummus, tartas, o albóndigas. Existen varios tipos destacando sobre todo la variante azucarera, distinta a la remolacha morada de consumo doméstico, por la importancia histórica que ha tenido la obtención industrial de azúcar, sobre todo para la industria andaluza. Zanahoria. La zanahoria es un producto que se puede encontrar la mayor parte del año y resulta curioso que aunque su color habitual es el naranja, es posible encontrarlas en otros colores. Además de fibra, agua y vitamina A, entre otros, la zanahoria es una buena fuente de potasio y fósforo, buenos aliados en caso de cansancio mental o estado de nervios. Judía verde. El mejor momento para consumir las judías verdes es durante los meses de primavera y verano. Las judías frescas presentan un color verde vivo y brillante, y deben tener un aspecto regular y no ser muy duras al tacto. Otros trucos para adivinar la terneza y calidad del producto es que sus granos no deben aparecer muy marcados, y si aparece una gotita de agua al quebrarse, según cuentan en Soy de temporada.