14 alimentos que parecen bajos en azúcar pero que en realidad no lo son

Pan de molde. El pan de molde es un alimento que forma parte de nuestra dieta diaria, pero, aunque lo cataloguemos de manera automática como un alimento «saludable», cuenta con un alto contenido de azúcar. Aunque el porcentaje puede varias según el tipo de pan de molde que elijamos, por cada 100 gramos, este alimento puede tener una media de cuatro azúcar. Bebidas vegetales. Muchos han sustituido la leche tradicional por las bebidas vegetales. Aunque podemos optar por versiones sin azúcar, algunas de las bebidas de este tipo comercializadas contienen altas cantidades de azúcar. Galletas de avena. Luis Riera, director general de la consultora de seguridad alimentaria Saia, asegura que este alimento no lleva azúcar, pero «en derivados de avena, como las galletas de avena o mezclas con este nutriente, sí que hay azúcar oculto y para ello es fundamental mirar la etiqueta previamente». Cereales de desayuno. Aunque, de nuevo, depende del tipo de cereales que elijamos, hay algunos tipos de desayuno que contienen altísimas cantidades de azúcar (pueden ir desde los 4 gramos a los 25, más o menos). Por ello, debemos mirar bien la etiqueta a la hora de comprarlos. Pizzas congeladas. En general las comidas precocinadas como sandwiches o pizzas poseen altos niveles de azúcares tanto en masas como ingredientes. Por tanto, «deberíamos evitar consumirlas o si las consumimos que sea de manera puntual», aconseja la nutricionsta Nazaret Pereira. Zumos. Aunque hay quienes aseguran que un zumo puede sustituir una de las piezas de fruta recomendadas del día, este producto, especialmente los envasados, aunque tiene algunas de las vitaminas de las frutas, tiene también una gran cantidad de azúcar. Sanwhiches envasados. «Ingredientes como el jamón york, fiambres, salsas de tomate frito, etc. destacan por el uso industrial de saborizantes y azúcares añadidos», explica la dietista Nazaret Pereira, Por otro lado, «los panes y masas industriales además de contener azúcares añadidos destacan por incorporar grasas hidrogenadas (las temidas grasas trans)». Agua de sabores. La nutricionista Ana Núñez comenta que este agua, «que no es de calidad» contiene una pequeña proporción de las vitaminas de las frutas, y esto se utiliza como reclamo. Pero, también tienen una «gran cantidad de azúcar, generalmente en forma de fructosa adicionada». Yogures de sabores. Aunque podemos optar por un yogur natural, que tendrá un porcentaje de grasa, pero no un alto porcentaje de azúcares, si optamos por las versiones azucaradas de estos, o por yogures con sabores de frutas, estamos incrementando la ingesta diaria de azúcar casi sin darnos cuenta. Aderezo de ensalada. Aunque a priori este tipo de producto no parezca alto en azúcares, normalmente las salsas y aderezos sí lo son. Luis Riera, director general de la consultora de seguridad alimentaria Saia, explica que «aunque no es propio de estos productos, sí que pueden añadirlo para contrarrestar la acidez del vinagre». Vinagre de módena. Según la Base de datos alimentarios estadounidense, por cada 100 gramos el vinagre de módena tiene 15 gramos de azúcar. Debemos tener en cuenta, que al utilizarlo, utilizamos una cantidad casi anecdótica. Sopa enlatada. La nutricionista Ana Núñez comenta que a la hora de elegir este alimento, lo mejor es que tenga verduras enteras, por así no encontraremos el azúcar liberado. La experta cuenta que en estos productos «la cantidad de sal y otros potenciadores de sabor son el problema». Salsa de tomate. Si optamos por preparar el tomate en casa, podemos controlar la cantidad de azúcar que lleva la salsa. En caso de comprarlo ya preparado, es importante saber que sí que contiene azúcar, una cantidad que se añade para contrarrestar la acidez del propio tomate. Galletitas saladas. Aunque sea una contradicción que las galletas «saladas» contengan gran cantidad de azúcar, según los datos de la Base de datos alimentarios estadounidense, estas contienen 7 gramos por cada 100.

14 alimentos que parecen bajos en azúcar pero que en realidad no lo son

Hay productos que engañan, y tienen más cantidad de azúcar de la que pensamos. Por ello, es importante conocerlos y fijarnos bien en las etiquetas, para no terminar añadiendo azúcar innecesario a nuestra dieta