Manuel Marín

Los ojos de esos niños

Los imagino perdidos, tratando de sortear golpes, o correazos, o cualquier otro castigo para acallar llantos

Manuel Marín

Miércoles Santo

La chicotá perdura siempre, sostenida en el sentimiento contradictorio de un miércoles que es un lapso roto entre el ayer y el mañana

Manuel Marín

Verdades y alpiste social

Todo relativismo se expande hasta multiplicarse en la conciencia colectiva

Manuel Marín

¡Eh, el despertador!

Hay lecturas de los sondeos menos balsámicas para el PP que forzarán a Feijóo a improvisar más hambre electoral

Manuel Marín

Bofetadas

Yolanda Díaz ha explotado la burbuja de dudas bajo la que esconde su cansino tonito de madre sobreprotectora

Manuel Marín

La moción de la nada

Lo de Tamames ya ha sido y nadie se ha enterado. Lo que queda es solo un cuplé, una coca-cola en el desierto

Manuel Marín

Para odiadores, vosotros

Te señalan, te marcan con su divisa, y entonces ya todos somos sospechosos

Manuel Marín

Berni, tito, sé fuerte

Lo que alimenta el caso no es el cohecho. Es el proceso 'prostituyente' y ese olor a despensa cutre con chistorra

Manuel Marín

Gordos, feos y calvos

El lenguaje de mucha, y buena, literatura está siendo convenientemente racializado con una limpieza étnica

Manuel Marín

Pato cojo, pato ciego

Entre partidas de petanca y cafelitos parleños en tu cuarto de estar, a Sánchez se le está torciendo el año electoral

Manuel Marín

La Harley del señor juez

Hoy Europa comunica al Gobierno que no hace falta echar agua al vino del separatismo con Puigdemont

Manuel Marín

Mentir para ser feliz

Daniel se ha hartado de tanta farsa buenista universitaria. Hace años que ya no recomienda alumnos para empresas

Manuel Marín

Debes saberlo

Las democracias no se conservan, se retienen o se reinventan. Se defienden

Manuel Marín

El hombre de hielo

Del TC nadie se entera de nada, pero de los etarras, corruptos y violadores, sí

Manuel Marín

Otro PSOE posible

Quedan socialistas, con nombres y apellidos, que no se han traicionado a sí mismos

Manuel Marín

El deseo más íntimo

Ha anestesiado a la democracia… y el problema es la derechona a bofetadas, que si moción sí, moción no