José F. Peláez
Kurtz, Kilgore y Wallard
Lo malo de las guerras es que son adictivas. También las culturales
José F. Peláez
Lo malo de las guerras es que son adictivas. También las culturales
Creo que podría distinguir a un español en un bufet de esos entre mil personas. Es el que justo ese día come muesli, cereales, kéfir, té negro y hasta melocotón en almíbar. Se nos nota el hambre histórico en la mirada, se nos ve la posguerra en cada gesto
José F. Peláez
Si hasta la derecha ve el mundo como Podemos, Iglesias no ha perdido
«Y es que, al final del todo, quizá no nos defina tanto aquello a lo que decimos sí sino a aquello a lo que decimos no»
José F. Peláez
Sólo hay una manera de hacer las cosas: el plan A, la ley. No hay Plan B y nunca lo ha habido
«Yo quiero volver a viajar como antes. Volver a tener esa sensación de estar completamente perdido, sorprendido, a la expectativa. Y vivir la vida como soñábamos que íbamos a vivirla. ¿En qué momento nos empezó a importar más la inflación que la música?»
José F. Peláez
O la cosa para aquí o nos comemos a Revilla cantando Motomami
Mi vida es tan maravillosa que no soporto que venga el verano a estropearlo todo, a poner el mundo en pausa, a desordenar mis rutinas y a ver la decadencia del mundo real
En España hemos sido capaces de hacer túneles que atraviesen Guadarrama, pero somos incapaces de unir Atocha y Chamartín con alta velocidad: eso debe resultar una aspiración técnicamente imposible
José F. Peláez
La realidad es que el esfuerzo da sus frutos solo a veces y, por eso, el éxito es la suma de muchas cosas
Hay un desorden maravilloso, un desorden conceptual que por más que intento analizar y estructurar, no se me logra. No hay respuesta al caos
Todos los hombres somos todos los hombres. Y no sé si nuestros cuerpos serán normativos. Lo que es normativo es mi amor infinito por cada uno de mis compañeros
José F. Peláez
A veces se nos olvida que para ser conservador es necesario tener algo que conservar
En Santander miro a la gente a la cara y todo parece normal, nada te hace pensar que puedan votar a Revilla. La vida