La última pirueta de Ciudadanos: pide llevar al marido de Alaya a la comisión de formación

De todos los expertos en auditorías que podía citar ante la comisión parlamentaria que investiga el fraude de la formación, Ciudadanos quiere llevar a Jorge Francisco Castro García . El partido que, a juicio del resto de grupos de la oposición, está actuando de «muleta» del PSOE, ha pedido que comparezca nada menos que el marido de Mercedes Alaya , la juez de la Audiencia de Sevilla que puso al Gobierno andaluz contra las cuerdas al aflorar la corrupción autonómica de los ERE y los cursos de formación. Por un error en la transcripción en el listado de comparecientes que registró el pasado martes en el Parlamento lo cita como «José Francisco Castro» .

Ciudadanos, que hizo presidenta de la Junta a Susana Díaz con sus votos, ha propuesto que comparezca en su condición de socio director de Engloba Auditores S.L. , una empresa extinguida en 2011 que ha ganado varios concursos para hacer auditorías externas convocados por la Junta de Andalucía. Es el único auditor que aparece en la relación de 145 personas que el partido de Juan Marín quiere que declaren. Su citación es una jugada extraña, porque no guarda relación con ninguna de las tramas de formación que se están investigando.

Castro fue auditor de la empresa Mercasevilla hasta 2002 y una imputada intentó por ello recusar a la magistrada cuando investigaba el intento de soborno por parte de dos exdirectivos de la lonja. El PSOE llegó a pedir a Alaya que se apartara del caso antes de que la Audiencia de Sevilla desestimara la recusación.

Por otra parte, la propuesta de Ciudadanos para que Susana Díaz sea la primera en comparecer ante la comisión de investigación levantó ayer las críticas más airadas del resto de grupos de la oposición. La vicesecretaria del PP, Loles López , aseguró que esta petición sólo pretende «blindar» a la presidenta y «desactivar la comisión».

El diputado de Podemos Juan Moreno Yagüe aseguró que si Díaz comparece la primera, este órgano quedará «desvirtuado». «Es necesario que nos enteremos del funcionamiento técnico y luego el responsable político dé explicaciones». Desde IU, Toni Valero dijo que la propuesta es «absurda» porque «quedará desvirtuado».