«El trasplante me ha cambiado la vida»

De los 563 trasplantes realizados en Andalucía durante los primeros siete meses del año, 19 han sido infantiles. Uno de ellos ha sido el caso de José Manuel, un niño malagueño de 12 años que sufría una fibrosis quística desde prácticamente su nacimiento, una enfermedad que le obligaba a estar en una silla de ruedas dependiendo de una bomba de oxígeno. A su corta edad, José Manuel sorprende con una madurez pasmosa fruto de la trágica situación que le ha tocado vivir. Su vida cambió por completo el 27 de junio cuando le sometieron a un doble trasplante de pulmón. Según relata su madre, María José, los últimos dos años y medios «fueron los más duros» . Pero llegó la esperada llamada. «A las 2 de la tarde del 26 de junio nos avisaron de que había donante y a las 3 de la mañana del día siguiente terminó todo», cuenta María José. «La vida me ha cambiado, bueno a todos», reconoce José Manuel.

«Ahora puedo llevar la vida de un niño normal, puedo jugar al fútbol y practicar otros deportes», algo que hasta ahora era inalcanzable. «Mis amigos no se lo creen pero yo tampoco», sonríe.

Él y su familia están muy concienciados con la donación «porque puede cambiar la vida de otra persona» . A su madre lo que realmente le gustaría es poder dar las gracias a la familia del donante y decirle que «dentro de mi hijo va el órgano de ese ser querido, yo creo que hasta para ellos sería gratificante saberlo».

José Manuel tiene ahora muchos planes .«De momento paso a 2º de la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), aunque me gustaría ser médico de mayor para curar a la gente, como han hecho conmigo», explica. « Sólo puedo dar las gracias a todas las personas que donan sus órganos para que otros puedan seguir viviendo, como es el caso de mi hijo», señaló su padre emocionado.