Sentencia del caso ERE
Susana Díaz niega la evidencia al decir que la Junta no se retiró del caso ERE
Todos los partidos han pedido la dimisión a la líder del PSOE-A, quien liga su futuro al de Pedro Sánchez para evitar que Madrid pida su cabeza
Susana Díaz rompió este jueves su silencio. Dos días después de hacerse pública la sentencia del caso de los ERE, que condena a los expresidentes de la Junta Manuel Chaves y José Antonio Griñán y otros 19 ex altos cargos del PSOE en la Junta andaluza por el reparto de más de 680 millones de euros en ayudas sin control. La secretaria general del PSOE-A rompió su silencio en televisión, en La Sexta, en Madrid, donde aseguró que tiene «ilusión y fuerza» para ser la candidata socialista e intentar recuperar el Gobierno de Andalucía.
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Porque para Díaz los ERE marcan un «fin de ciclo», son «pasado». Tanto que la expresidenta andaluza aprovechó su intervención para negar que la Junta se retirase del caso cuando ella estaba al frente del Gobierno andaluz. Un hecho que se produjo el 17 de octubre de 2016. La Junta, tras años ejerciendo un comedido papel de acusación como parte afectada por el presunto fraude, siguiendo un informe del Gabinete Jurídico, en el momento previo al envío de la causa a la Audiencia no encontraba indicios de delito contra los acusados. Este giro, condicionó la petición de fianza a los imputados. Sólo a Griñán le solicitaban avales por 4,6 millones de euros antes las posibles responsabilidades civiles. Y de paso obstaculizaba el procedimiento para la recuperación del dinero defraudado, según viene reiterando el actual Gobierno de la Junta de Andalucía que ha encargado al mismo gabinete jurídico recurrir a la vía civil para intentarlo.
La expresidenta de la Junta dijo que el PSOE no aparece en los 1.8021 folios de la sentencia
No fue la única negación de hechos que hizo Susana Díaz para poner tierra de por medio con el gran fraude, que según la dirigente no es del PSOE,aunque se cometió durante gobiernos socialistas. La expresidenta de la Junta dijo que el PSOE no aparece en los 1.8021 folios de la sentencia. Pero sí. Las siglas parecen hasta en siete ocasiones , la mayoría para establecer la relación entre los acusados y los beneficiarios de las ayudas.
Otro argumento fácilmente desmontable de la entrevista-declaración de Susana Díaz es que el sistema, «fraudulento» según los jueces, en realidad se creó para agilizar ayudas «en el bolsillo de 7.000 prejubilados, sobre todo de las reconversiones industriales de los astilleros de Cádiz y Huelva y Santana Motor en Jaén ». Se alinea así Díaz con la teoría de otro de los condenados en el caso, Javier Guerrero, exdirector de Trabajo, que aseguró que estas ayudas eran para las «criaturas necesitadas de ayuda sociolaboral». En este sentido la Audiencia es categórica, las ayudas se otorgaron de forma discrecional a empresas que se «enriquecieron» y no a los trabajadores.
Susana Díaz, insistió en el mensaje que más repite el PSOEpara poner muro de contención al duro golpe de la demoledora sentencia:«ni el PSOE ni «Manolo y Pepe» —como ella llama a los expresidentes Chaves y Griñán—, se han enriquecido. El dinero de los ERE, indicó, «no está en el bolsillo de Manolo o Pepe ni en Panamá ni en Suiza» sino en el de «219 intrusos». Para la expresidenta de la Junta, Chaves y Griñán llevan «diez años pagando. Pepe ya ni salía a la calle», se lamentó.
Juez Alaya
También Díaz, aunque sin nombrarla, hizo varias alusiones a la jueza que abrió e instruyó la macrocausa de los ERE, Mercedes Alaya. La socialista criticó que hiciera coincidir imputaciones e hitos del caso con momentos políticos relevantes en Andalucía. «Cada vez que había un proceso electoral, imputaban a alguien. A la misma hora que tomaba posesión el Gobierno, había imputaciones», se quejó. Ninguna mención al hecho de que la sentencia se conociera tras el 10-N y el impacto que esto podría haber tenido en las elecciones.
La expresidenta andaluza aprovechó además para subrayar en varias ocasiones que había sido la encargada de implantar normas de control para evitar casos como el de los ERE. De esta forma, cuestionada por el papel de Chaves y Griñán en la trama , la expresidenta de la Junta prefirió no contestar: «Pregúnteme por lo que yo hice, por los controles que yo puse, pero evidentemente no me puede preguntar por algo en lo que no estaba». Ya saben, los ERE son pasado.
Entre las urgencias de Díaz está unir su destino al de Sánchez tras la sentencia. «Que a Pedro y a mí nos quieran meter en esto... Yo entonces era diputada y él concejal en Madrid», recordó . De esta forma, la socialista intenta neutralizar cualquier intento de culpar solo al PSOE andaluz del caso ERE y que la dirección federal pueda pedir su cabeza sin comprometer también la de Sánchez.
No tendrán que desgastarse en Ferraz: todos los partidos representados en el Parlamento andaluz menos el PSOE, han pedido ya su dimisión.