PLENO
Susana Díaz: «Donde estoy siempre me votaron, no me ponen a dedo»
La presidenta anuncia que antes del verano estará la Oficina Antifraude en un pleno del Parlamento marcado por los reproches a su gestión
La política andaluza lleva atascada desde hace meses en un bucle del que no puede salir. Las aspiraciones de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, a la Secretaría General del PSOE , que aún no están resueltas, se convierten en el centro del debate en el Parlamento andaluz sesión tras sesión. El Pleno celebrado este jueves tampoco ha servido para romper ese bucle. Los grupos de oposición no cesan de echárselo en cara durante sus intervenciones y ella sale al contraataque manteniendo el suspense hasta el final.
«Donde estoy siempre me votaron, no me ponen a dedo », replicó la mandataria socialista al presidente del PP andaluz, Juanma Moreno. Díaz se mostró especialmente hiriente con el dirigente del centro-derecha y utilizó su réplica para meter el dedo en la llaga de las divisiones internas en este partido tras la composición de la nueva dirección nacional del PP surgida del congreso celebrado el pasado fin de semana. «Felicite a Arenas: el torero siempre será torero y el subalterno, subalterno», reprochó a Moreno, a quien le afeó su empeño en «hablar mal de Andalucía».
El líder del PP-A había preguntado a la presidenta cuál ha sido su aportación para acabar con las desigualdades que arrastra Andalucía con otras comunidades autónomas «después de 36 años» de Autonomía, bajo gobiernos del PSOE. Díaz tiró del manual de la confrontación con los gobiernos centrales del PP. "¿Por qué? Pues, por falta de inversión y compromiso histórico con Andalucía y cuando ustedes han gobernado en el Gobierno de España».
En el segundo turno, Moreno contraatacó con el plan de fusiones hospitalarias cuyo rumbo ha tenido que rectificar el Gobierno ante la escalada de protestas de profesionales sanitarios. «Sólo acierta cuando da marcha atrás», advirtió. Le pidió que hiciera lo mismo con «su plan de dependencia» y con el impuesto de sucesiones, « bonificando el 99% del impuesto , una batalla que vamos a ganar». «Si no cambia, será recordada por buscar el mejor momento para irse. Si sigue caminando tres metros por encima del suelo, no dejará ninguna huella en Andalucía ».
Fuera de este cara a cara, algunas cuestiones empezaron a clarificarse en el Pleno. El portavoz de Ciudadanos, Juan Marín, trató de arrancar a la presidenta una fecha para aprobar la Oficina Antifraude , propuesta recogida en el acuerdo de investidura. A lo más que llegó Díaz fue a prometer que «a lo largo de este semestre lo vamos a finalizar y aprobar». Marín le pidió que sean fiscalizado por ella los entes instrumentales de la Junta y que haya coordinación con los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado y con el poder judicial.
Los portavoces de IU y Podemos, Antonio Maíllo y Teresa Rodríguez , utilizaron sus turnos de palabra para reclamar a la Junta un aumento del presupuesto destinado a Educación pública hasta alcanzar el 5% del PIB regional. La presidenta andaluza no se cansó de repetir que «cuando haya que elegir entre educación pública y concertada , siempre prevalecerá la pública», pero sin quitar conciertos. No salió de ahí. El mismo bucle de siempre.