Facturas falsas
El PP asegura que el caso UGT será «la puntilla» a Susana Díaz: «Es un caso familiar»
Toni Martín ha criticado la actitud «más que sospechosa» de Díaz con las labores de investigación en el caso de los cursos de formación
El PP cree que el caso de las facturas falsas de UGT , por el que se ha procesado a dirigentes del sindicato por defraudar 40 millones, es «la puntilla para la carrera de Susana Díaz» , ya que ha denunciado que además de la vertiente política es «un caso familiar» por la implicación de su marido y tres cuñados.
El vicesecretario de Organización del PP andaluz, Toni Martín , ha calificado este asunto como «el caso Moriche» , por el apellido del marido de Susana Díaz, quien cobró nóminas por impartir cursos de formación de dos de las 14 ayudas en las que el juez ve posible irregularidad.
Ha señalado que dinero público de los parados andaluces «usado fraudulentamente» acabó formando parte «de la economía familiar» de Susana Díaz , ya que su marido «se endosó» hasta 200.000 euros brutos durante diez años impartiendo cursos de formación, además «haciéndose pasar» por docente cuando era auxiliar administrativo.
Martín ha opinado que «cuesta creer» que Susana Díaz no sabía nada de la procedencia del dinero «que entraba en su casa cuando ella era ya una responsable del partido de primer nivel».
Ha explicado que la «relación» familiar de Díaz con este caso va más allá, ya que dos cuñados fueron trabajadores del instituto de formación de UGT y, junto a su marido, sus nóminas y gastos de viaje se cargaron a las ayudas concedidas por la Junta al sindicato.
Además, otra cuñada de Díaz aparece como trabajadora en el mismo expediente de su marido, ha subrayado el dirigente del PP, quien considera que «ya son demasiadas casualidades familiares».
Toni Martín ha criticado la actitud «más que sospechosa» de Díaz con las labores de investigación en el caso de los cursos de formación, que cree que responden a una intención de defender a sus compañeros de partido y a «los miembros de su familia».
«La sentencia de los ERE y el caso Moriche son la puntilla de la carrera política de Susana Díaz y el testamento para el régimen socialista andaluz. Lo único que le queda es coger la puerta y abandonar el Parlamento».
Martín ha dicho que no piden su marcha por interés partidista, ya que en ese caso lo que más le interesaría al PP es que Díaz siga al frente del PSOE andaluz porque es «un apolítica amortizada y lo más débil que pueden tener enfrente en unas elecciones».
También ha aludido a la parte del caso de los cursos de formación que hace referencia a la financiación de las sedes compartidas del PSOE y UGT, sobre lo que ha señalado que es vox populi que esa forma de financiar el partido con el dinero público era una práctica «posiblemente extendida por Andalucía».
Ha advertido de que el PP va a seguir investigando y pidiendo información «por todas las vías posibles» sobre un extremo que supondría «un auténtico escándalo en la financiación del PSOE andaluz».
Ha cuestionado si los «falsos alquileres» era una practica común y cuántas sedes del PSOE se han pagado con el dinero «de todos los andaluces».
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