XV CONGRESO DEL PP-A
El PP andaluz restituirá en sus cargos a los políticos que resulten absueltos en los tribunales
Aprueba en la ponencia de reglamento suspender de afiliación y de competencia de gobierno a aquellos a los que se les abra juicio oral
«Hay que poner cordura, se acabaron los juicios paralelos». El PP andaluz restituirá en sus puestos de manera automática a aquellos de sus cargos públicos que resulten absueltos después de un proceso judicial. Es una de las medidas incluidas en la ponencia de reglamento que ha aprobado esta formación política en el XV congreso autonómico que celebra este fin de semana en Málaga.
En concreto, la ponencia —aprobada por unanimidad— recoge que se procederá a una suspensión cautelar de afiliación cuando se abra juicio oral . Del mismo modo, el cargo público que sea procesado a este nivel será obligado a dejar sus competencias de gobierno. Es decir, que si a un concejal se le abre juicio oral, podrá seguir siéndolo pero abandonando su parcela de gestión.
En el caso de que terminara resultando absuelto en sentencia firme, además se le restituiría su afiliación .
Los populares andaluces recogen de esta manera la denominada «rehabilitación reputacional» que recogen de forma novedosa los estatutos aprobados por el Congreso nacional celebrado en febrero. En concreto, fue el granadino Carlos Rojas quien presentó la enmienda que permitió la aprobación de esta medida.
La ponencia de reglamento ha sidio la que mayor participación ha generado en el cónclave que los populares desarrollan en Málaga. En concreto, según ha afirmado este sábado Patricia Navarro , encargada de coordinarla, ha recibido el 45 por ciento de todas las enmiendas presentadas a las cuatro ponencias.
Finalmente, han sido aceptadas o transaccionadas el 70 por ciento, que han sido incorporadas al texto. El espinoso asunto de las incompatibilidades , que afectan a cargos como el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto , o al de Hacienda, José Enrique Fernández de Moya , se ha terminado pasando de puntillas, aprobando el mismo régimen que ya recibiese el visto bueno en Madrid. Es decir, la tónica general debe ser la de «un hombre, un cargo», pero se plantean excepciones singulares para los casos que pueden resultar más polémicos.
Noticias relacionadas