Mascarillas y calles sin coches: así cambiará las ciudades de Andalucía el coronavirus

Urbanistas y políticos repiensan la convivencia en las calles ante la necesidad de distanciar a las personas en estructuras pensadas para acercarlas

Vecinos de Córdoba pasean en el primer día de la desescalada del confinamiento en Córdoba Vaalerio Merino

J. J. Madueño

Paseos marítimos rebosantes de gente haciendo deporte, personas que caminan por la orilla de la playa sin guardar los dos metros mínimos, porque en muchos casos es imposible. Se agolpan junto al mar en las sendas habituales, las vulgarmente llamadas «rutas del colesterol» , aquellas áreas usadas para cumplir con la recomendación médica de caminar, al menos, una hora al día. Yendo más allá, hay adolescentes que aprovechan la salida para juntarse con los amigos, incluso comprar algo de alcohol y hacer botellón en una zona apartada. Padres que se paran a hablar en alguna esquina mientras sus hijos juegan juntos con una pelota , amigos que quedan para hacer deporte o vecinos que tratan de engañar a la autoridad y se bañan en el mar aparentando hacer ejercicio. Los expertos dicen que el mal uso de las franjas horarias para salir en la desescalada puede acarrear un repunte de la pandemia, por lo que los gobiernos municipales dan prioridad a tomar medidas para atajar las aglomeraciones y evitar un rebrote del coronavirus.

Los epidemiólogos avisan que estas actitudes son peligrosas . «No importa la fase de la desescalada en la que estemos, hay que mantener la distancia social, que salva vidas, mantener la higiene de manos y llevar mascarilla en los lugares públicos », explica Salvador Oña, jefe del Servicio de Medicina Preventiva del Hospital Regional de Málaga. Medidas que hay que extremar a la hora de hacer deporte. «Las personas que corren tienen que mantener una distancia de 10 metros, si no llevan mascarilla . Al hacer deporte dejas un halo y hay que extremar las precauciones y evitar cruzarse con otras personas», asegura Eduardo Martínez, catedrático de Microbiología de la Universidad de Málaga.

Preocupa que la gente se amontone sin medidas de protección. Máxime cuando los datos preliminares del estudio serológico en Andalucía dicen que sólo el 2,7 por ciento de los andaluces ha desarrollado anticuerpos y podría ser inmune a la enfermedad. «Puede haber un repunte; si es en verano será menos peligroso, pero si se produce ya en otoño se puede dar una doble infección con otro virus, como la gripe, y ser más peligroso. Hay que estar prevenidos y vacunarse contra estas enfermedades para evitar riesgos », recomienda Salvador Oña. Ante esto, Martínez es el primero que hace una recomendación a los consistorios: «Se pueden organizar los sentidos de las calles, para que todo el mundo vaya en la misma dirección y no haya cruces de personas».

«Ciudad sociable»

Pero las medidas no están tan claras para los urbanistas porque «los espacios públicos de las ciudades están concebidos para la convivencia, la sociabilidad y el contacto», asegura Salvador Moreno Peralta, arquitecto y urbanista, que añade que «ahora se da la paradoja de que los espacios públicos de libertad a los que salimos como animales enjaulados pueden convertirse en una trampa aún mayor». «Las personas deben salir a la calle respetando la distancia social , y por ello hay que garantizar que en la misma calle haya lugares con repuestos de esos pequeños espacios para uso público que la permitan», afirma Moreno Peralta. De eso se debe ocupar la Policía Local, que en lugares como Motril o Jaén ha desarrollado importantes controles en las zonas de mayor afluencia.

De este modo, este urbanista recomienda a los diferentes ayuntamientos intervenir «muy activamente» decidiendo los espacios para las salidas , acotando y delimitando zonas, controlando aforos… «Defiendo con toda decisión las capacidades y responsabilidades de cada consistorio en su autonomía para adaptar a lo concreto las decisiones generalistas, para con la exacta configuración de sus territorios poder gestionar las desescaladas», remarca Moreno Peralta.

Y en ese sentido se han lanzado los gobiernos municipales de Andalucía. Granada ha rebajado a 10 kilómetros por hora la velocidad máxima en alguna de sus calles ; y ha peatonalizado otras para ampliar espacios por los que pasear y así evitar las aglomeraciones. Esa es una de las ventajas que reconoce Estepona para atajar el problema de las salidas masivas, ya que esta ciudad de la Costa del Sol tiene en la actualidad 120 calles de uso exclusivo de peatón, además ha habilitado espacios nuevos para la práctica deportiva.

Almería, desde un primer momento con las salidas de los niños, ya decidió que iba a cortar calles para dar más amplitud. Al igual que Cádiz de 20.00 a 23.00, al detectar que eran las horas más concurridas. Además, con la llegada a la Fase 1 el Ayuntamiento gaditano reprogramó los semáforos para evitar que los usuarios de las vías se agolpasen en los pasos de peatones. No son las únicas, puesto que Málaga también cerró calles para entregarlas al peatón .

La ampliación de espacios es uno de los recursos más usados. En la capital de la Costa del Sol se han cortado lugares para peatones y ciclistas, señalizados de 70 kilómetros de vías para adaptarlos a carril bici en zonas donde no había. También se ha realizado un recordatorio y difusión de las rutas de la Málaga cardiosaludable y de los senderos usados de forma habitual para este tipo de prácticas.

Marbella también ha habilitado un espacio reservado para los ciclistas y anunció que se iban a crear espacios de circulación de un solo carril por sentido en el paseo marítimo. Al igual que Fuengirola o Rincón de la Victoria , que ha decidido ordenar el tráfico humano en las calles donde han detectado que se produce más tránsito de personas. Los consistorios disponen señalética específica, y se apela a responsabilidad de cada vecino.

Informadores en Roquetas

Benalmádena tiene un bando con el cierre de varias calles para que sólo transiten los peatones y en el que se recogen «la obligación del viandante de circular por la parte derecha del acerado en el sentido de su marcha, e insistimos en el cumplimiento de las distancias mínimas entre personas». «También se ha insistido en la prohibición de circular en bicicleta por espacios peatonales», afirma Víctor Navas, alcalde de Benalmádena . Otros optan por poner en las zonas de más afluencia a informadores, como es el caso de Roquetas de Mar, que va a poner a un equipo en la playa, para recordar a todos los usuarios las medidas de seguridad básicas.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación