Gobierno del cambio
Juanma Moreno quiere un gobierno sin bicefalias ante una oposición frontal del PSOE
Sus primeras medidas serán una auditoría de la Junta y suprimir el impuesto de sucesiones
Lograda la gesta de convertirse en el primer presidente de la Junta de Andalucía no socialista gracias a un complicado juego de equilibrios entre su socio, Ciudadanos, y su apoyo en la investidura, Vox, Juanma Moreno Bonilla , ha resuelto con solvencia su segundo escollo. Ha evitado las filtraciones sobre su equipo frente a la torrentera de rumores y conjeturas de los últimos días.
A diferencia de su aliado en el gobierno, que ha ido dosificando los nombres de sus consejeros, todos ellos independientes, el pr esidente del PP andaluz ha preferido despejar las incógnitas él mismo, con una comparecencia ante la prensa cargada de simbolismo. La primera que realiza como presidente en el Palacio de San Telmo, la «casa» que hasta hace dos días habitaba Susana Díaz, el santuario institucional del socialismo andaluz.
En un salón de actos repleto de periodistas, incluidos asesores y eventuales de la Oficina del Portavoz saliente, el protagonista del momento se presentó como el presidente de un gobierno «compacto» del PP y Cs y sin bicefalias incómodas .
Las primeras medidas con las que se estrenará el Consejo de Gobierno serán iniciar los trámites para rebajar al 99 por ciento el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y el encargo de una auditoría integral de la Junta de Andalucía y de su «administración paralela» a organismos públicos como la Cámara de Cuentas. Trabaja con la previsión de que la primera radiografía de las entidades instrumentales , bajo sospecha de irregularidades y enchufismo, esté lista en «mes y medio» para decidir las prioridades en el gasto. Este análisis previo se centrará en la maraña de agencias, empresas y fundaciones, donde «hay más sombras», es decir, «aquello que ha generado polémica, investigaciones judiciales y menoscabo de fondos públicos».
El primer consejo se reunirá este sábado de forma excepcional en Antequera para «homenajear» los 40 años del pacto que puso las bases de la Autonomía. Ante un PSOE que tiene las lanzas afiladas y al que le está costando digerir la pérdida del poder, Moreno no quiere fisuras. PP y Cs tienen un proyecto común —recogido en un documento con 90 medidas— y su mayor preocupación es «no defraudar» la ilusión para «cambiar a mejor los intereses de los andaluces», subrayó.
El mensaje estaba muy medido. A la misma hora y en el otro punto de interés informativo de la jornada, el Parlamento andaluz, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera , posaba con el vicepresidente de la Junta, Juan Marín , y los otros cuatro consejeros. Todos ellos tomarán hoy posesión de sus cargos en el Palacio de San Telmo.
Sin distinción de siglas
El nuevo «barón» popular quiso minimizar la posible imagen de duplicidad que se trasladase en aras de una relativa armonía externa. Aseguró que cualquier formación es « libre de hacer las reuniones oportunas », pero «a partir de esta semana el gobierno es uno y, por tanto, actuaremos como un solo gobierno porque los problemas de los andaluces son los mismos sin distinción de siglas ni de orígenes». El vicepresidente de la Junta en funciones y diputado del PSOE, Manuel Jiménez Barrios, calificó de «llamativa» esta coincidencia de actos.
Gestión conjunta de la RTVA
Hasta poco antes de la comparecencia, que se inició con media hora de retraso, se han producido contactos entre el PP y Ciudadanos para cerrar el reparto de tareas del Ejecutivo . Moreno reconoció que «hay cosas que todavía se están negociando». Por parte del PP, el interlocutor de Marín es Elías Bendodo, el consejero de Presidencia, Administraciones Públicas e Interior, quien va a asumir las competencias de Memoria Histórica. La derogación de la ley que regula esta materia y su sustitución por una Ley de Concordia es uno de los compromisos adquiridos por el PP con Vox a cambio de la investidura del presidente.
Uno de los «flecos» que quedan por limar son las sociedades van a tener una gestión colegiada, aparte de la Radiotelevisión Pública de Andalucía (RTVA) . Para evitar suspicacias, se va a crear «un ente compartido» con el objetivo de que Canal Sur «no esté en manos de un dirigente del PP o de Ciudadanos», sino que se adopten decisiones conjuntas. De este organismo colegiado van a depender otras entidades públicas que no concretó. La agencia IDEA, motor económico de la Junta y epicentro de escándalos como el caso ERE, quedará adscrita a la consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco, de Cs.
Moreno era ayer un presidente «sin equipo, sin gabinete y sin gobierno», según confesó. Hasta hoy, cuando toman posesión sus once consejeros. Tardará más en despejar la incógnita de quién será su portavoz del Gobierno. Habrá que esperar hasta el primer Consejo de Gobierno. Al frente de la portavocía del PP en el Parlamento estará Loles López Gabarro . La secretaria general del partido relevará a Carmen Crespo , futura consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, porque «es fundamental la máxima coordinación con el gobierno» frente a una oposición que no se lo va a poner nada fácil.
Noticias relacionadas