Guerra de intrigas en el viaje de Díaz y Moreno a Bruselas
Los mandatarios del PP y PSOE abren su gira por las instituciones europeas con un cruce de reproches
Andalucía busca la complicidad de la Unión Europea dividida. Puede parecer un oxímoron, pero así es la política andaluza. Sus principales líderes, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y el máximo responsable regional del PP, Juanma Moreno , viajan a Bruselas entregados a una frenética competición de agendas y una contraprogramación de reuniones por separado con las autoridades europeas para vender la marca Andalucía y atraer o, al menos intentarlo, fondos a esta comunidad lastrada por el alto paro y encuadrada desde 2014 en el grupo de las regiones «en transición».
Noticias relacionadas
A falta de acuerdos tangibles, las intrigas han rodeado el inicio del viaje de ambos mandatarios al centro de decisión de la política comunitaria. La «guerra fría» que mantuvieron en el reciente Debate sobre el Estado de la Comunidad, celebrado la pasada semana, se ha trasladado ahora a la capital de Bélgica, que últimamente no para de recibir visitas de presidentes autonómicos aunque por motivos muy diferentes.
Complicidad
Como curiosidad, la presidenta andaluza inició su viaje con una entrevista con una comisaria perteneciente al Partido Popular Liberal, la responsable de Comercio de la UE, Cecilia Malmström . A juzgar por sus palabras, encontró más complicidad en ella que en los populares de su país. «Las dos compartimos una firme defensa del sector de la #aceituna ante las amenazas de la administración de EEUU», escribió Díaz en su Twitter.
Horas antes, el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, dirigía sus dardos verbales contra Moreno. Aprovechando su comparecencia de prensa posterior a un Consejo de Gobierno que no estuvo presidido por Susana Díaz, su «número dos» calificó como «ridículo» que, por segundo año consecutivo, haga coincidir su gira europea con la de la presidenta. Esta contraprogramación, dijo, «pone de manifiesto que no hay alternativa al gobierno de la Junta». «Lo vimos en el debate sobre el Estado de la Comunidad y ahora lo vemos otra vez con esa inconsistencia como estrategia política», recalcó Jiménez Barrios, quien incluso recomendó a Moreno que prescindiera de los asesores que le han aconsejado viajar a Bruselas.
El intenso programa de actividades estaba organizado por la eurodiputada popular Teresa Jiménez Becerril.
El presidente del PP andaluz no se arredró en el choque. «Está el PSOE instalado en una guerra de nervios por las ya cada vez más cercanas elecciones autonómicas que lleva a una contraprogramación permanente, lo cual me parece ridículo y absurdo», aseguró tras aclararles a los periodistas en Bruselas que él tenía preparada su agenda desde hace más de quince días, según recoge la agencia Efe. El líder de los populares andaluces aprovechó al máximo su primera jornada. En las instituciones europeas se reunió con el comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, y la de Economía Digital y Sociedad, Mariya Gabriel, así como con el vicepresidente de la Comisión para Fomento del Empleo, Jyrki Katainen. El intenso programa de actividades estaba organizado por la eurodiputada popular Teresa Jiménez Becerril.
Desde el punto de vista informativo, el plato fuerte fue el anuncio de que propondrá al Parlamento autonómico una iniciativa destinada a aumentar los puntos de carga para coches eléctricos en la región con el objetivo de que Andalucía pueda liderar la «transformación de la energía renovable».
A la espera de que hoy se reúna con el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, socialista como ella, las primeras declaraciones de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, en Bruselas fueron críticas hacia el Gobierno central. La mandataria andaluza rechazó el traslado a los inmigrantes que llegan a las costas españolas a un cárcel, la de Archidona (Málaga) , que aún no ha entrado en funcionamiento. Además, reclamó a Mariano Rajoy que ponga «cuanto antes» sobre la mesa un nuevo modelo de financiación autonómica.
Desde Jaén, el coordinador de IU, Antonio Maíllo , ponía el contrapunto a la polémica. «Hay que normalizar los encuentros con las instituciones europeas» y dejar «esa suerte de debate cateto », concluyó.