CORONAVIRUS ANDALUCÍA

La dura oposición de Susana Díaz a golpe de tuit

La líder del PSOE andaluz usa las redes para desgastar a la Junta de Andalucía por su gestión de la pandemia

Susana Díaz preside la reunión del Grupo Socialista en el Parlamento el pasado 22 de julio VANESSA GÓMEZ

A. R. Vega

La agenda pública de la secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz , lleva dos semanas en blanco. El último acto reseñable, con su correspondiente convocatoria a la prensa, se remonta al 29 de julio. Ese día se despachó con críticas al Gobierno andaluz del PP y Cs porque, a su juicio, « no garantiza ni seguridad sanitaria ni seguridad jurídica » en la vuelta a las aulas en medio de la pandemia. Al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, «le da igual todo», proclamó a los periodistas después de reunirse con el «equipo asesor» en materia educativa del PSOE andaluz.

Desde entonces se ha prodigado poco o nada, más allá de conceder algunas entrevistas intermitentes y por fascículos. Alejada de los focos y de las cámaras, Susana Díaz se ha abonado al «agitprop» de las redes sociales para ejercer una oposición combativa con la que desgastar al Ejecutivo andaluz por su gestión de la crisis del coronavirus. Nada de lo que ha hecho le parece bien. Rara es la jornada que no le dedica un tuit para ponerlo a caldo en su particular y catastrófico parte diario de la pandemia.

«Los andaluces piden reforzar la educación y la sanidad públicas para afrontar con garantías la pandemia. Más docentes y más sanitarios. Y la respuesta de Moreno Bonilla sigue siendo desviar fondos a la privada . No le duelen los servicios públicos», publicó el 28 de julio junto con un vídeo de su entrevista en 7TV. Tampoco la sanidad funciona, para la expresidenta de la Junta.

En otro mensaje, el 3 de agosto, aseguró que la Junta recibe dinero del Gobierno que no se gasta en luchar contra el virus: «Es inexplicable que sigamos a la cola en test PCR de detección de #COVID19 siendo una de las comunidades con más rebrotes ».

El 7 de agosto, subía un grado más en la escalada de alarma: «86 brotes activos. 316 contagiados en las últimas 24h (los positivos se han triplicado en una semana y ya estamos en cifras de abril). Pero el gobierno andaluz mantiene su gestión caótica y su dejadez (faltan rastreadores, sanitarios...) ¿Y Moreno Bonilla?». Ese día hizo doblete porque dedicó otro torpedo al consejero de Educación, Javier Imbroda, por su decálogo para una vuelta a clase segura.

Compra de mascarillas

También acusaba a Moreno de «regatear» con los fondos que recibe del Gobierno para la compra de mascarillas para docentes.«Cuenta atrás para la vuelta al cole: a falta de 28 días el gobierno andaluz sigue escondido. Moreno Bonilla ha conseguido inquietar a todos los colectivos de la comunidad educativa», disparaba la lideresa de la oposición desde su retiro vacacional con el dibujo de una señal de peligro el día 13.

Tras el nacimiento de dos corrientes díscolas y las críticas de los diputados a Cortes hacia su gestión al frente del PSOE-A, algo impensable cuando controlaba la Junta y el partido con mano de hierro, la lideresa de la oposición endurece su tono . Las redes sociales son el mejor termómetro de ese nuevo estado de ánimo.

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