CASOS ERE Y FORMACIÓN
El decano de los abogados de Sevilla, a favor de separar las macrocausas
José Joaquín Gallardo evita comparar las instrucciones de Alaya y de Núñez Bolaños aunque alerta de «dilaciones vergonzosas»
El decano del Colegio de Abogados de Sevilla, José Joaquín Gallardo , ha apostado por potenciar la incoación de piezas separadas en las macrocausas «cuando los hechos investigados así lo permitan, ya que lo contrario significa abocar la instrucción a dilaciones indebidas y vergonzosas» en algunos casos.
A pesar de apoyar con esta tesis la instrucción que está realizando la juez María Núñez Bolaños sobre el caso ERE y el caso de los cursos de formación, José Joaquín Gallardo no ha querido pronunciarse sobre las diferencias existentes entre las metodologías de trabajo desarrolladas por las juezas Mercedes Alaya y María Núñez Bolaños . En este sentido, el decano de los letrados sevillanos ha afirmado que, «especialmente en las causas mediáticas el tiempo acaba evidenciando cuándo la instrucción ha sido la correcta y adecuada o cuándo se produjeron actuaciones instructoras innecesarias que acabaron perjudicando el buen fin de la investigación judicial».
José Joaquín Gallardo considera que el no formar piezas separadas cuando es posible significa además «prorrogar el sufrimiento de las personas investigadas y poner en riesgo incluso el buen fin de la instrucción», por lo ha ha abogado por «cambiar el chip que se ha venido utilizando en la instrucción de algunas macrocausas».
Contra la Ley de Enjuiciamiento Criminal
El decano de los abogados sevillanos ha realizado estas declaraciones al referirse a la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que fija los plazos máximos de instrucción, lo que a su juicio «incrementará la burocracia de la oficina judicial», aunque ha confiado en que, «en la práctica, no tendrá efectos dramáticos de archivos por el transcurso de ese plazo legal».
«Los juzgados ya están considerando una obligación rutinaria la de ampliar automáticamente los plazos sea o no razonable esa ampliación, aunque yo creo que el incumplimiento de tales plazos difícilmente podría conducir al archivo de las actuaciones», ha aseverado Gallardo , que ha querido dejar claro que, con esta reforma, «no se ha inventado nada y simplemente se ha añadido innecesariamente una carga burocrática más a los juzgados».
José Joaquín Gallardo ha aseverado que «son absolutamente inadmisibles las enormes dilaciones que se producen en muchos procesos», por lo que ha opinado que «para acabar con estas dilaciones vergonzosas, que a veces se producen en asuntos muy mediáticos, deberían adoptarse otro tipo de medidas distintas» a la de duración máxima de la instrucción que recoge la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.