La crisis de la sanidad centra el debate en el Parlamento de Andalucía

La situación en la que se encuentra la sanidad andaluza ha centrado la sesión de control al Gobierno que se ha celebrado en la mañana de este jueves en el Parlamento andaluz. La presidenta de la Junta andaluza, Susana Díaz, ha tenido sendos enfrentamientos duros con el portavoz del PP, Juanma Moreno y con el de IU, Antonio Maíllo , a quienes ha negado la gravedad de la situación actual.

Así, Susana Díaz ha dicho a Moreno que la sanidad «le importa un pimiento y solo persigue denigrarla y manchar su imagen, porque el objetivo del Partido Popular es hacer negocio con el sistema público de salud ». Y ha ido a más. La presidenta a acusado a Moreno de confundir «oposición con destrucción porque sólo piensa cómo hacer daño y mentir, intentando denigrar la imagen de esta tierra y de sus servicios públicos».

Susana Díaz respondía así a la pregunta de Juanma Moreno quien ponía de manifiesto que la presidenta «tiene una enorme ceguera al no ver los gravísimos problemas que tiene Andalucía, como el desempleo o la situación de la educación y de la sanidad».

«Las dimisiones de la cúpula de la Consejería de Salud son el reconocimiento a su nefasta gestión. Y ha dicho que todo estaba bien mientras consideraba culpables a los ciudadanos y a las plataformas sanitarias».

El líder de los populares andaluces tuvo duras palabras contra la presidenta, «no he conocido a ningún presidente que desprecie a los ciudadanos que se han manifestado en la calle de la manera en que lo ha hecho usted. Es una presidenta sobrepasada por los muchos problemas de los andaluces y es evidente que está ausente», ha asegurado Moreno, para quien Díaz dedica muchas energías «al lío interno» del PSOE y «muy poquitas al lío interno» en que su partido mete a los ciudadanos.

Con el líder de Izquierda Unida la tensión no ha sido menor, ni mucho menos. Antonio Maíllo ha puesto de manifiesto que, desde la anterior vez que le preguntó a la presidenta en el Parlamento, «las mareas se han extendido a otras provincias distintas de Granada o Huelva, al celebrarse manifestaciones en Sevilla o Almería, los sindicatos se han levantado de la mesa de negociaciones con la Junta al sentirse engañados en Granada, se han derogado las órdenes de fusiones hospitalarias y se han producido las dimisiones. Y lo que te rondaré morena».

Antonio Maíllo ha incidido en que, con pacientes que «están más de ocho horas y media en urgencias o ciudadanos que reclaman atención sanitaria las 24 horas como en la Sierra Sur de Sevilla no se puede negar que tenemos una crisis en la política sanitaria», por lo que ha reclamado un pleno extraordinario sobre sanidad. A juicio de Antonio Maíllo, «los problemas de la sanidad no se solucionan con la comparecencia del consejero de Salud como la de este pasado miércoles, dedicando un minuto para decir que ha habido errores y 19 minutos para detallar virtudes , y en la que los aplausos quizá fueron preocupantemente largostal vez por si era la última vez que en el Parlamento pudieran aplaudir a dicho consejero».

La respuesta de Susana Díaz ha sido acusar a Antonio Maíllo de « ir del brazo de quienes pretenden acabar con la sanidad pública y pretenden hacer negocio con ella va en sentido contrario a lo que dice defender, que es la sanidad pública, y sirve para blanquear a la derecha».