El botellón se esconde en los polígonos y discotecas de Andalucía, según el Defensor del Menor
Jesús Maeztu denuncia que los jóvenes cada vez empiezan a beber antes y que están expuestos a una publicidad constante de bebidas espirituosas
El botellón no ha desaparecido en Andalucía . Solo se ha escondido en los rincones más oscuros de la ciudad. Es una de las conclusiones del informe que ha presentado este martes en el Parlamento de Andalucía el Defensor del Menor, Jesús Maeztu. «Los jóvenes andaluces se esconden ahora en microbotellones en polígonos y a las afueras de las discotecas», ha explicado Maeztu.
La oficina del Defensor del Menor de Andalucía presentaba este martes su informe anual , que en 2017 tiene como tema central el consumo de alcohol en menores. Y, en este aspecto, hay dos elementos que Maeztu quiere poner de relieve: el primero es la atomización del fenómeno del botellón, que ha huido de la luz del centro de las ciudades de Andalucía para refugiarse en la oscuridad de polígonos, discotecas y zonas costeras donde «se es más permisivo con el consumo en la calle », ha detallado Maeztu.
Por otro lado, el Defensor del Menor ha querido dejar patente la sobrexposición de los jóvenes andaluces ante la publicidad del alcohol. «Hoy vas por la calle y ,las marquesinas están llenas de anuncios de ron. Eso se te mete en la cabeza y más si tienes 14 años», ha reflexionado. Por eso, desde su oficina se ha planteado a la Junta de Andalucía la modificación de la norma que regula la publicidad exterior, de modo que los menores andaluces no convivan de forma tan cotidiana con el alcohol en las calles.
El amianto en los colegios
Según el informe que ha presentado el Defensor del Menor , el alcohol no es el único tema que preocupa a este departamento. Y tampoco a los andaluces, que han presentado hasta 400 quejas por la presencia de amianto en los colegios de la comunidad .
En asuntos de menores, el número total de actuaciones del Defensor del Menor el año pasado fue de 5.009 , de las que 2.385 se refieren a quejas y 2.624 a consultas.
De las 2.385 quejas, 1.872 fueron registradas en el Defensor del Menor el año pasado -el resto procedían de ejercicios anteriores, pero aún se trabajaba en ellas-, lo que supone un aumento del 79,1 por ciento con respeto al ejercicio de 2015 , lo que ha sido atribuido por Maeztu a la inquietud suscitada por la presencia de amianto en centros escolares.
En el apartado de Educación de este informe, donde se consigna que el mayor número de quejas ha sido por «el elevado número de centros docentes en los que muchas de sus infraestructuras e instalaciones contienen amianto», el informe del Defensor añade que «la Junta aprobó un plan y hay un calendario para la retirada de estos materiales». Educación acapara, con 731 expedientes, el mayor número de intervenciones, entre quejas y consultas .
En Salud, se denuncia la ausencia de pediatras en determinadas zonas de Andalucía, la falta de secciones suficientes de atención temprana o la falta de una correcta adaptación en espacios asistenciales y de atención a la salud mental de menores.
Violencia deportiva
Uno de los aspectos más novedosos recogidos en el informe es que para la Defensoría ya es motivo de preocupación la recurrencia de actos violentos , protagonizados incluso por los propios padres , en algunos eventos deportivos donde participan menores y jóvenes.
Ante ello, Maeztu ha aludido a soluciones «imaginativas» como entregar a los padres un escrito con la ficha federativa animando a colaborar en la erradicación de estas conductas , asistir a cursos o actos divulgativos de la problemática de la violencia en el deporte o establecer un programa de actividades.
Las ayudas para luz y agua para familias en precario con menores a su cargo, el aunar esfuerzos para evitar a los menores los efectos de desahucios, la mejora de infraestructuras públicas para evitar el afectar a la calidad de vida de los niños -parques y jardines en mal estado, vías y acerados que suponen un riesgo o solares en estado de abandono, por ejemplo- o incidir en colectivos de menores vulnerables o en desamparo, como las víctimas de trata, los menores no acompañados, víctimas de violencia de género o refugiados, son otras de las denuncias importantes de la Defensoría.