Ahogados piscina
Vecinos de los turistas ahogados en Mijas: «Eran tan amables que todos estamos conmocionados»
El padre, Gabriel Diya, era pastor evangelista de Open Heavens London en Charlton, al sureste de Londres, y regentaba un negocio inmobiliario
El día de Nochebuena la tragedia no solo ensombreció a la localidad malagueña de Mijas, también llegó hasta Reino Unido. La muerte de un padre y dos de sus hijos en la piscina de un complejo vacacional de la Costa del Sol conmocionó a a los vecinos y a la comunidad evangelista de Charlton , al sureste de Londres.
Gabriel Diya, de 52 años, murió ahogado junto a sus hijos Comfort, de nueve, y Praise-Emmanuel , de 16, al tratar de rescatar a la más pequeña cuando se adentró en la parte más profunda de la piscina. Ninguno de los tres sabía nadar y su madre y otra hermana presenciaron la escena sin poder hacer nada para evitarlo.
Diya era pastor en Open Heavens London , una iglesia que forma parte de la red Iglesia de Dios Cristiana Redimida, con sede en Nigeria, y además, según informó el periódico británico Daily Mail, dirigía su propio negocio inmobiliario.
La noticia ha sido un jarro de agua fría para los vecinos y la comunidad de Charlton a la que pertenecían. « Con el corazón encogido , extendemos nuestras condolencias a la familia, la parroquia, los amigos y asociados del Pastor de Área Gabriel Diya, quien falleció tristemente, junto con dos de sus hijos en una trágico accidente durante unas vacaciones familiares en España», manifestó su iglesia en una publicación de Facebook.
La madre de familia, Olubumni Diya, de 49 años, y la hermana mediana, Favor Diya, de 14, necesitaron apoyo psicológico tras lo ocurrido. Su testimonio ante la Guardia Civil ha sido clave para arrojar luz a la investigación, que desde el principio se enfocó como un accidente.
Conmoción
La inmensa mayoría de medios de comunicación británicos se han hecho eco este suceso que ha se ha llevado por delante a tres miembros de una misma familia muy querida entre sus allegados . En declaraciones al periódico The Guardian, Lara Akins, de Charlton, se mostraba asombrada por la noticia. « Todavía no puedo comprenderlo , es impactante. Eran tan amables que por eso todo el mundo está conmocionado», explicaba.
En la misma línea definía a la familia Emma Morris, la hija de unos vecinos, que detacaba lo «agradables» que eran y lamentaba lo sucedido. «Es muy triste. Una pena». O Mohsin Sharif, en cuya tienda compraba habitualmente la familia. «Estoy realmente triste. Es una buena comunidad», aseguraba.
En los días posteriores a los hechos y hasta que madre y hermana confirmaron que no sabían nadar, ganó peso la hipótesis de un fallo en el sistema de succión de la depuradora de la piscina, que hubiera impedido a las víctimas salir del agua. Sin embargo, los investigadores no encontraron ningún defecto de funcionamiento y finalmente la Guardia Civil ha apuntado a que se trató de un «trágico accidente» debido a la falta de pericia de las víctimas al nadar .
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