La joven desaparecida de Torrox está detenida en Estambul

La joven malagueña desaparecida en Turquía ha aparecido. Está en detenida en Estambul, como ha confirmado la familia. «Se la llevan a una cárcel de mujeres. La están trasladando y ha vuelto a estar incomunicada», ha relatado Tamara Romero, portavoz de la familia, a ABC. Las jóvenes fueron detenidas por entrar de forma ilegal en el país y han estado incomunicadas desde el pasado domingo a las 22.15 que se les perdió la pista. Las jóvenes estarían con vida y, según la versión de los hechos contada por la madre de Jimena, están sin documentación porque el padre de Shaza, novia de Jimena de origen egipcio, les rompió los pasaportes en el aeropuerto de Georgio. Huyendo pasaron a Turquía, donde habrían sido detenidas por entrar de forma ilegal en el país.

Esta mañana de jueves, el padre de Shaza ha llamado a la familia de Jimena en Torrox para decirles que él no tenía a las dos jóvenes desaparecidas y pedir que «le devuelvan a su hija». «Nos ha dicho que no las quiere matar», explicaba Tamara Romero, portavoz de la familia, que descubría las esperanzas de encontrarlas con vida, pero desconfió de las intenciones del padre de Shaza. «La quiere para matarla. Su hija es una deshonra para su familia por ser homosexual. En Dubái está penado con la muerte », señalaba Romero. «Si es capaz de matar a su hija, qué no le hará a Jimena», apuntaba la portavoz de la familia.

Los investigadores del caso solicitaron a la familia el número desde el que el padre de Shaza se ha puesto en contacto con ellos y habló con la hermana de Jimena, María del Valle Rico. La intención era llamar a Dubái para interrogarle e intentar aclarar algún indicio sobre el paradero de las dos jóvenes , cuya pista se había perdido el pasado domingo a las 22.15 horas con una conversación con la madre de Jimena, Ramona Teresa Montero, antes de tomar un autobús en Samsun (Turquía) con destino a Estambul.

Según el relato de la madre a la Guardia Civil durante la denuncia, Jimena le advirtió de que si no volvía a tener noticias suyas antes del mediodía del lunes se pusiese en contacto con la embajada, porque «algo malo había pasado». Las jóvenes, afincadas en Londres, habían viajado unos días antes a Dubái para visitar a la madre de Shaza, después de ser avisada de que se encontraba gravemente enferma.

Según las explicaciones de la progenitora de Jimena a la Guardia Civil, todo era una estrategia del padre «para retenerla en ese país». Según la madre, ambas jóvenes se enteraron de que los propios padres habían denunciado a su hija por homosexualidad, por lo que tuvieron que escapar del país. Salieron por Georgia, donde pasaron tres días en casa de unos amigos con intención de tomar un vuelo de regreso a Londres. El viaje no pudo efectuarse , según el relato de las jóvenes, porque los familiares de Shaza se encontraban allí e intentaron llevársela por la fuerza.

Denuncian que el padre de Shaza rompió el visado de su hija, el pasaporte de Jimena y las amenazó de muerte. Tanto la pareja, como el padre, fueron detenidos por la policía georgiana en el aeropuerto. La madre detalló que, tras salir en libertad, las dos mujeres fueron conducidas a la frontera turca y, tras varios intentos, lograron entrar en el país y tomar un autobús hasta Samsun, donde volvieron a ser detenidas y puestas en libertad horas después , siendo trasladadas a la estación de autobuses, desde donde iban a viajar hacia Estambul. Es en ese momento cuando se les perdió la pista. Las autoridades las arrestó al ir indocumentadas y han permanecido incomunicadas hasta este mediodía, que Jimena se han vuelto a poner en contacto con su familia en la localidad malagueña de Torrox.