Turismo
La residencia «masona» de Mario Conde en Estepona será un hotel de lujo
La cadena griega Ikos invertirá 150 millones de euros en remodelar el hotel Princess para desarrollar un exclusivo «todo incluido»
La cadena de hoteles griega Ikos desarrollará en Estepona un resort de lujo familiar con una inversión de 150 millones de euros . El desembolso será en dos partes. Por un lado, los 75 millones de la compra del enclave y, por el otro, los 75 millones de la reforma. Lo hará en los terrenos de la antigua residencia San Jaime , que construyera para sus ejecutivos en 1964 el histórico presidente de Banesto Pablo Garnica Mansi. Aquella misma que Mario Conde reformó, para abrirla a todos los empleados de la entidad bancaria, en 1992 con la polémica inversión de 5.300 millones de pesetas .
Mario Conde reformuló un espacio con 24 chalets de 6 plazas con parque de juegos infantiles, campo de fútbol, tenis, baloncesto, hockey y bolera. Era una época en las que las noches en este enclave eran amenizadas por un desconocido Chiquito de la Calzada , genio del humor fallecido hace un año en su Málaga natal y que, poco después del ingreso en prisión del banquero, dio el salto a la fama en «Genio y Figura».
Un lugar en el que se recuerda los iniciales primeros bungalós con ventanucos pequeños por seguridad de los que veraneaban dentro. En la actualidad, y a la espera de la reforma de Ikos, mantiene la alta verja de hierro que impedía entrar desde la playa en la época que acogía a los gerifaltes de Banesto.
Símbolos masones
Sobre el lugar corren diversas leyendas, como que algunos huéspedes movieron la numerología de las habitaciones a su antojo. Ocupantes supersticiosos, amigos de la cábala y practicantes del esoterismo, entre los que había algunos masones, que cifraron con sus números de la suerte en sus habitaciones preferidas. En algunos casos, llegaron a instalar símbolos de la masonería en diversos lugares del complejo , que fue vendido por Banesto en 1995.
Finalmente acabó en manos de la cadena Princess&Resorts, que durante años lo llenó con un operador francés especializado y lo convirtió en un pequeño retiro vacacional para familias francófonas. Fueron muchos los avatares del tiempo hasta que los griegos se fijaron en este sitio. Lo hicieron por estar al lado del mar, ofrecer grandes posibilidades de desarrollo y tener una buena conexión con el aeropuerto .
Ahora será un «todo incluido» de lujo , que tiene dentro de la oferta hasta vehículos para poder desplazarse a visitar enclaves cercanos. Se harán conciertos con restaurantes de la zona, cuya oferta estará integrada dentro del precio de la contratación. Programado para abrir en marzo de 2020 , tiene un total de 85.000 metros cuadrados y ocho piscinas climatizadas en primera línea de playa , solo separado del mar por una verja y un estrecho paseo marítimo.
Cuenta con 300 metros pegados a una playa en la que se van a invertir 1,8 millones de euros en un dique y un espigón . La idea es recuperar las dimensiones que tenía la playa hace 50 años. Para ello la empresa tendrá que sacar más de 60.000 metros cúbicos de arena. Reforma que servirá para una amplia oferta de baño y deportes acuáticos .
Se proyectan 411 habitaciones con siete restaurantes , en los que el menú lo diseña un chef con estrella Michelin. La apuesta por grandes cocineros, habrá uno español que aún no se ha cerrado, es habitual en los cinco hoteles de la cadena en Grecia. La oferta se completa con un amplio abanico deportivo, SPA y siete bares. En total, se espera una generación de 635 empleos directos , de los que la compañía hotelera se ha comprometido a que el 60 por ciento de las contrataciones sean de personas del entorno.
