Tribunales
Los padres de la niña muerta en las vías de Pizarra piden reabrir el caso por asesinato tres años después
Antonio y Almudena han encargado una investigación extrajudicial para aclarar las incógnitas del caso y aportar nuevas evidencias
![Los padres de Lucía Vivar en rueda de prensa](https://s1.abcstatics.com/media/andalucia/2020/07/28/s/padres-lucia-vivar-k9iC--1248x698@abc.jpg)
Los padres de Lucía Vivar, la menor de tres años que fue hallada sin vida en las vías de Pizarra (Málaga) el 27 de julio de 2017, pedirán que se reabra el caso para investigar «su asesinato» . Apuntan a una investigación extrajudicial que han encargado para ver qué ocurrió aquella trágica noche. Aseguran que las indagaciones arrojan datos sobre un posible homicidio de la niña , que sus padres siempre han defendido, siempre en contra de la versión oficial de suceso, que hablaba de un trágico accedente.
En base a esas nuevas evidencias que puedan aportar, el padre de Lucía, Antonio Vivar, pedirá que se reabra el caso para esclarecer todos los interrogantes que persisten sobre la muerte de su hija. La pequeña desapareció mientras jugaba con sus primos en una terraza de un restaurante, donde cenaban sus padres con la familia. Pasó de jugar con sus primos a esfumarse.
La última imagen que tiene su madre, Almudena Hidalgo, de la niña es jugando con la pinza de su pelo en el bar de la estación de Pizarra. Lo siguiente que supo de ella es que estaba muerta, tendida en las vías del tren. Su cadáver estaba a más de cuatro kilómetros del lugar donde desapareció , donde la versión oficial de los investigadores mantiene que llegó sola.
Oficialmente la Audiencia Provincial de Málaga archivó el caso en febrero de 2019 . Se estimaba que la niña estaba con sus padres y otros familiares cenando. Cuando se dispusieron para marcharse, sobre las 23.30 horas del 26 de julio, no vieron a Lucía , que había estado en brazos de su padre sobre las 22.50 horas, según su propia declaración. Se dio cuenta de la desaparición a la Guardia Civil y se organizó una búsqueda con vecinos de la zona, especialmente por las vías del tren, donde algunos se adentraron, como Antonio Vivar, sin encontrar rastro de su hija.
Un golpe del tren
A las 6.43 horas del 27 de julio, el maquinista que conducía el tren de cercanías que realiza el trayecto entre Málaga y Álora encontró su cadáver a la altura del kilómetro 158,4 en Álora. Los forenses determinaron que la pequeña había muerto por un golpe del tren en la cabeza en un desafortunado accidente, pero eso no disipó las dudas que sus padres tenían sobre su muerte. Así siempre se opusieron a que se dejara el caso como algo accidental, puesto que no han obtenido explicaciones sobre aspectos que consideran fundamentales.
Sus padres nunca han creído que la pequeña pudiese recorrer sola cuatro kilómetros con aquellas sandalias por las vías del tren en la más absoluta oscuridad. Tampoco que, cansada por el esfuerzo, se acurrucara sola en las vías donde el Cercanías de la línea C2 la habría golpeado y causado la muerte .
Para Antonio y Almudena a la niña se la llevaron, como reconocieron en una entrevista en ABC, la mataron y la dejaron allí abandonada. Sin embargo, los forenses del Instituto de Medicina Legal de Málaga ya rechazaron que se hubiera producido un homicidio. Pero no se lo creen, por eso no han dejado de investigar y recaudar apoyos, en modo de más de 127.000 firmas, para que se vuelva a investigar la muerte de Lucía tres años después.