CASO LUCÍA
Los padres de Lucía Vivar tras el archivo del caso por la Audiencia de Málaga: «No es un punto y final»
La familia de la pequeña, que fue hallada muerta junto a las vías del tren en Pizarra en 2017, aseguran que «no están locos, solo pedimos un poco de lógica»
La muerte de la pequeña Lucía Vivar en julio de 2017 sigue sin cuadrarle a sus padres, quienes no entienden, ni comparten, que su hija llegase hasta ese punto de las vías del tren, donde fue hallada muerta, sola. El pasado martes la Audiencia Provincial de Málaga tumbó el recurso de apelación de los progenitores y archivó la denuncia por homicidio imprudente contra la Guardia Civil, Adif y Renfe. Pero la familia no tira la toalla y aseguran que «no es un punto y final» .
A través de una publicación en Facebook, la madre de la pequeña a querido agradecer «las tantísimas muestras de apoyo» que han recibido, pero insiste en que continuarán la lucha para «hacer justicia y conseguir una verdad» , acusando a quienes «la intentan ocultar» y tildando de «ineptos e incompetentes» a quienes han desestimado la denuncia.
La «barbarie» que ha decidido la Audiencia es un archivo «provisional» de la causa, según la misiva de su progenitora, que recurrirá «cuantas veces sea preciso» . El descontento de la familia por el tratamiento que se le ha dado al caso de la pequeña Lucía es latente y lo han demostrado en varias ocasiones con manifestaciones y recogidas de firmas, acciones que continuarán.
«Demostraremos que no estamos locos , sólo pedimos un poco de lógica». Prosigue la publicación, que pide a los amigos de la familia que sigan ayudándoles en «esta dura batalla». «De alguna manera conseguiremos ganarla y desmontar esta patética película » concluye la madre, no sin antes añadir: «Todo lo haremos por ti, mi ratita preciosa. Te amamos».
La Audiencia tumba el caso de la pequeña
Lucía de tres años desapareció de l bar de la Estación de Pizarra sobre las 23.30 horas el 26 de julio de 2017. Su cuerpo fue encontrado pasadas las 6.40 horas de aquella madrugada, cuando el maquinista del tren de cercanías que realizaba el trayecto entre Málaga y Álora vio un bulto en el viaje de ida.
La niña estaba a más de 4 kilómetros del lugar donde había desaparecido. Sin vida y tendida en uno de los maderos entre los raíles sobre la parte izquierda. Ahí es donde la encontró el conductor del convoy , que a la vuelta se percató que era la pequeña.
La sala ratifica que «no existen indicios de criminalidad que apunten a la participación de terceras personas». La niña habría ido hasta allí sola y habría muerto por un traumatismo craneoencefálico severo , debido al fuerte golpe en la cabeza que le habría dado el tren, mientras se encontraba acurrucada en la oscuridad del campo, cansada por la caminata.
¿Homicidio imprudente? Para los padres sí, para la Audiencia no
Por otro lado, un segundo auto, archiva la denuncia por homicidio imprudente que impusieron los padres de Lucía contra la Guardia Civil, Adif y Renfe. Los padres de la niña alegaron que el fallecimiento se produjo por «la escasez de medios de investigación efectuados por la Guardia Civil», por «la deficiencia del visionado de la grabación de imágenes del lugar» y, por último, por la «no paralización del tráfico ferroviario» .
La Audiencia de Málaga estima que la dotación de agentes de la Guardia Civil, como de cualquier otro estamento de ayuda al ciudadano, «fue insuficiente para evitar el suceso final», pero reseña que ello «no convierte , ni la actuación de los que acudieron al auxilio, ni de quien los podían dirigir, en una acción de imprudencia grave y trascendente, ni está relacionada con el fatal desenlace».
Explica la sala en el auto que es cierto que del visionado de las grabaciones se desprende que fue insuficiente, pero ello se debe relacionar con el momento de su visionado, la urgencia, los medios, la forma y la situación temporal, y en esas circunstancias «no se puede entender que exista tampoco relevancia penal».
A lo que añade para terminar de cerrar la causa que, en cuanto al no corte del tráfico ferroviario , «se debe estar a la necesidad de la colectividad» y añade que «permitir el uso de las vías públicas de forma prudente no es erróneo y carece del elemento subjetivo necesario para actuar penalmente»
Además, el auto vuelve a desestimar los dos informes que contradecían la versión oficial. El del criminólogo Luis Duque y el del forense Luis Frontela . Estima que el caso no se ha cerrado «en falso» y que existen evidencias de que la niña anduvo aquella noche por las vías, como una grabación de una cámara de seguridad o las manchas de grasa que presentaba la pequeña.
El caso podría ser reabierto , según explican fuentes judiciales a ABC, si se aportan pruebas que puedan hacer proseguir la investigación y prueben la participación de terceras personas.
Noticias relacionadas