Las reuniones seguirán siendo de seis personas en el exterior y cuatro en el interior SUR

Pablo Marinetto

Andalucía por fin conoce las restricciones que habrá en la comunidad de cara a Semana Santa y no son las esperadas. La evolución de crisis sanitaria en las últimas semanas ha obligado al Gobierno andaluz, siguiendo el consejo del comité de expertos, a mantener el cierre perimetral de todas las provincias, aunque hay novedades en lo que respecta a comercios, bares y restaurantes, que podrán permanecer abiertos hasta las diez y media de la noche .

Las nuevas restricciones, anunciadas este tarde por el presidente, Juanma Moreno, entrarán en vigor el próximo viernes 19 de marzo y se prolongarán durante tres semanas . No osbtante, Moreno ha advertido que podrán ser revisidas si la situación epidemiológica empeora.

Los malagueños no podrán así desplazarse fuera de los límites de la provincia y tampoco de Andalucía, puesto que el cierre se mantiene también en la comunidad. El margen que se ha concedido a los empresarios del comercio y la hostelería afecta directamente al horario del toque de queda , cuyo inicio se retrasa hasta las 23.00 horas.

La apertura de los negocios dependerá, eso sí, de que la zona no tenga un incidencia acumulada superior a los 1.000 casos por cien mil habitantes en los últimos catorce días, aunque es cierto que a día de hoy, son muy pocos los municipios de la región que rebasan ese límite.

Donde no hay cambios es el límite de personas que podrán reunirse a partir del viernes y hasta después de las fiestas, concretamente hasta el 9 de abril. Seguirá siendo de seis personas en el exterior y de cuatro en el interior de los locales. Esta medida fue una de las acordadas la pasada semana en el comité interterritorial y será común a todas las comunidades.

El presidente ha reconocido ser consciente de que habrá andaluces a los que no les gusten las decisiones adoptadas este miércoles, pero ha insistido en que son «necesarias». El cierre de las ocho provincias -ha dicho- es una decisión «prudente, sensata y oportuna» , guiada por el comité y con el objetivo de evitar cuarta ola tan agresiva como la de después de las navidades .

Una vez más, Juanma Moreno ha mostrado su preocupación por la fase de meseta que atraviesa la pandemia en Andalucía, de ahí que haya vuelto a apelar a la responsabilidad y a la prudencia. «La curva no termina de bajar. El descenso se ha parado y la tendencia es a subir».

Durante su comparecencia ha apuntado que las nuevas variantes de la Covid-19 son uno de los factores que más preocupa a los expertos y al propio Gobierno andaluz. Según Moreno, la cepa británica es dominante ya al 80 por ciento en algunas provincias como Almería y la cepa sudafricana está ya también presente en la comunidad.

A esto, ha sumado la paralización de la vacuna de AstraZeneza, que mantiene retenidas 40.500 dosis en Andalucía. La vacunación no va al ritmo deseado. Tenemos sólo a un 4,4 por ciento de la población inmunizada», ha subrayado.

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