Educación
Licitan las obras que acabarán con el «colegio de lata» en Mijas
El nuevo centro, sin fecha de inicio ni finalización, debería poner fin a una reclamación de seis años
Aunque sin fecha de apertura, el final del «colegio de lata» de Mijas parece más cerca. Este centro, formado en su totalidad por aulas prefabricadas, y en el que estudian 470 niños a partir de los tres años, tiene sus días contados después de que la Junta de Andalucía informara este lunes de la licitación de los trabajos de una escuela real con 36 aulas. Anuncio que se produce después de las recientes quejas de los padres ante el último incumplimiento de los plazos prometidos por el Ejecutivo andaluz.
La consejera de Educación, Adelaida de la Calle , explicó que se ha enviado al Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) la licitación de las obras del nuevo colegio Indira Gandhi , ubicado en la zona de Las Lagunas, por un valor de 5,8 millones de euros.
Esta intervención permitirá la retirada de 12 módulos prefabricados con un total de 21 aulas en las que durante seis años han ido pasando niños a pesar de las sucesivas denuncias de los padres sobre las malas condiciones de las mismas. Llegaron a documentar inundaciones, filtraciones de lluvia, plagas de insectos o baños rotos .
El colegio se ubicará en una parcela de 13.053 metros cuadrados, de los que 5.246,85 serán construidos, y tendrá capacidad para albergar a 900 escolares.
La zona docente contará con un total de 36 aulas -12 de Infantil y 24 de Primaria-, algunas de las cuales tendrán aseos incorporados. En cuanto a los espacios comunes, la consejera detalló que el colegio tendrá biblioteca, sala de usos múltiples, gimnasio con vestuarios, aula de música, comedor con cocina en office y vestuarios. Las zonas exteriores estarán compuestas por pistas polideportivas, huerto, zona ajardinada, estacionamientos y zonas de juegos con porches cubiertos para infantil y primaria.
El anuncio de la Junta de la Andalucía no ha satisfecho a todos. A los padres y madres, en primer lugar; y al PP, en segundo. Los primeros esperaban que De la Calle cumpliera su promesa de desplazarse al centro y resolver todas las dudas, «como prometió cuando nos recibió en el Parlamento», explicó la presidenta del AMPA, Maríló Olmedo .
Esta representante, en declaraciones a ABC, no ocultó su malestar por lo que considera una utilización de la problemática que llevan años padeciendo sus hijos. «Después de que nos dijeran que la consejera iba a ir el viernes a Mijas; cambiaran los planes y afirmaran que estaba enferma para citarnos en Málaga con la delegada de Educación, Patricia Alba; acudimos y nos encontramos con una reunión en la que estaba De la Calle, la portavoz del PSOE de Mijas –Fuensanta Lima- y el alcalde –Juan Carlos Maldonado (Ciudadanos)-», relató Olmedo.
La presidenta de la AMPA mostró su contrariedad por lo sucedido porque « nos hubiera gustado que la consejera hubiese visitado el cole, ver en qué condiciones se encuentra y que escuchara a los padres , no sólo a dos –que formaron la representación que acudió al acto convocado ayer por la Junta-». «Para cuando digan que las aulas prefabricadas están muy bien, que lo haga con conocimiento de causa, sabiendo como están nuestros niños», reprochó.
«Pasó lo que hablamos días antes: “se pone buena y se quita a todos los padres de encima”», agregó, para manifestar que «nos quedamos por educación, pero declinamos hacernos cualquier foto porque este colegio llega seis años tarde».
Igual piensan desde las filas del PP mijeño. Su vocal de Educación, Carmen Márquez , explicó en un comunicado que, «con la habitual tardanza y lentitud a las que nos tiene acostumbrados la Junta, es posible que haya niños, que ahora están en las caracolas, que pasen al instituto habiendo hecho Primaria entera en aulas prefabricadas. Es decir, no habrá colegio, como pronto, hasta finales de 2017 ».
«Es una buena noticia que por fin salgan a concurso las obras, pero llegan muy tarde y mal, ya que será de cuatro líneas y no seis», sostuvo la dirigente popular, quien quiso mostrar su reconocimiento a los padres y madres de los alumnos del colegio Indira Gandhi, «que han demostrado tener una paciencia infinita en este calvario, que esperemos que dejen de sufrir pronto».