Sucesos
Una muestra de ADN delató al asesino de Lucía Garrido
La Guardia Civil detiene, casi ocho años después del crimen, al individuo que mató por encargo a esta mujer y reactiva la identificación del inductor
![Casa donde fue asesinada Lucía Garrido el 30 de abril de 2008](https://s2.abcstatics.com/media/2016/01/26/s/abc-alhaurn-crimen2--620x349.jpg)
«En el lugar de los hechos se han recogido muestras que corresponden a la víctima, no existiendo perfiles genéticos de los restantes». Este era el final de uno de los informes realizados por los investigadores del crimen de Lucía Garrido , una mujer cuyo cuerpo sin vida fue encontrado flotando en la piscina de su casa del municipio malagueño de Alhaurín de la Torre. Un misterio sin aclarar durante casi ocho años, con daños colaterales para una Guardia Civil que ahora está más cerca de la resolución. Agentes de la unidad de Asuntos Internos y del Servicio Criminalístico han puesto nombre a una huella hallada en el lugar del suceso y han detenido al sicario que presuntamente golpeó y apuñaló a Lucía . «Ahora queda saber quién le pagó», señalaron fuentes cercanas al caso.
Según pudo saber ABC, el arrestado es de nacionalidad española y actuó por encargo, por lo que los esfuerzos de los agentes se centran en averiguar la persona que lo contrató para acabar con la vida de Lucía. Circunstancia que puede aclarar el detenido, contra el que consideran que hay pruebas «muy sólidas» .
Su captura, que se llevó a cabo en el municipio de Mijas por parte de agentes desplazados desde Madrid, ha sido posible gracias a una huella que en su momento se tomó en el lugar del crimen y que ahora «ha saltado» en las bases de datos.
El arrestado permanecía ayer incomunicado mientras los responsables del caso aceleraban las pesquisas para despejar la incógnita que falta en el caso: ¿Quién fue el inductor del asesinato? Bajo el foco de los investigadores siempre ha estado la expareja de la víctima: Manuel A.H. , un singular personaje que acogía animales salvajes en la finca y que mantenía una relación tormentosa con Lucía , con quien tuvo una hija. Individuo que, meses después del crimen, mataba a tiros a dos colombianos que habían entrado en la finca.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional así lo concluyeron en un informe. Las relaciones de este individuo derivaron en la detención del que fuera máximo responsable del Servicio de Protección de la Naturaleza , lo que motivó que la titular del juzgado de Violencia contra la Mujer número 1 de Málaga apartara del caso al Instituto Armado.
En relación con estos hechos hay hasta tres piezas separadas : la relacionada con el crimen, la vinculada al agente detenido y la abierta por la muerte violenta de los dos colombianos, que lleva el Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga.
La muerte de Lucía se produjo el 30 de abril de 2008 en la casa de la calle Los Martínez en la que vivía la víctima. La reconstrucción cronológica de los hechos sitúa entre las 13:15 y 14:45 el crimen. «Una o varias personas debían estar esperándola en el lateral oeste de la vivienda», donde fue «sorprendida, apuñalada y golpeada brutalmente con un ladrillo —que se localizó fragmentado—, para finalmente tirarla a la piscina donde falleció por asfixia », recoge el oficio policial, del que dio cuenta este periódico.
Los investigadores apuntaron sobre la autoría del crimen que «es comprensible pensar que el autor del asesinato correspondería a una persona muy cercana a la víctima o con muchísima información sobre sus hábitos y el domicilio». Aseveración sostenida con «hechos probados» como que el criminal «hizo uso de una copia de la llave de acceso a la finca », supo ocultarse, sacó el bolso de la piscina y sustrajo el teléfono móvil, que «hasta la fecha no ha sido hallado».
La hermana de Lucía alertó de la desaparición de un dossier en el que ésta guardaba las denuncias y otra documentación sobre Manuel, sobre lo que los agentes señalaron que «la intención del autor cuando extrajo el bolso del interior de la piscina era buscar las llaves del domicilio y entrar en el mismo para sustraerlo».
Los entonces responsables del caso —Asuntos Internos de la Guardia Civil ha continuado haciendo pesquisas— no tenían ninguna duda de que el «inductor» del crimen supuestamente fue la expareja de Lucía, que se «aseguró una coartada» con «acciones incomprensibles» , como ser grabado por cámaras de seguridad y recoger distintas facturas de gasolina. Esta acusación, que sirvió de base para que la autoridad judicial imputase al sospechoso por el crimen, se fundamentó en al menos siete declaraciones del entorno de la víctima de las que se desprendía un conflicto latente, las presuntas afirmaciones del sospechoso de que se quitaría sus problemas con 3.000 euros y su afán por vender la finca en la que residía Lucía y su hija.
La hermana y amigas de la víctima relataron los temores de ésta por su marido, llegando a «mirar los bajos del vehículo». Además, precisaron que el origen de todo fue la separación y que las amenazas crecieron con el paso del tiempo. «Te voy a matar… con dinero se hace de todo», aseguraron que escucharon decir al sospechoso , algo que veladamente ratificaron los amigos de éste cuando afirmaron que supuestamente dijo «en tono jocoso que tenía una mujer que valía 3.000 euros y que conocía a gente que podía hacerlo».
Un año después de la muerte de Lucía, su expareja se veía envuelto en un extraño incidente. Manuel A.H. era detenido después de acabar con la vida de dos ciudadanos colombianos que habían irrumpido en su vivienda y a los que disparó con una escopeta de caza. Siempre defendió que fue en defensa propia . Las hipótesis se dispararon, pero no se pudo avanzar en la resolución de la muerte de la mujer. Hasta ahora.
Los investigadores de Asuntos Internos de la Guardia Civil, según las fuentes consultadas por este periódico, se muestran confiados en que de la declaración del sicario presuntamente contratado para matar a Lucía salga el nombre de quien le pagó. Las próximas 72 horas serán determinantes.
Noticias relacionadas