Narcotráfico
Hoteles de lujo y coches rápidos, la vida de un narco francés con cinco identidades en Marbella
Fue detenido por saltarse un control policial y tenía una requisitoria para responder por tres años de prisión en su país
Usaba sus cinco alias para pasar desapercibido en Marbella, hasta que él mismo descubrió su secreto por una temeridad al volante en un control policial. Se trata de un traficante francés. Está buscado por una requisitoria en vigor desde el pasado mes de noviembre, como miembro de una organización criminal dedicada al tráfico de drogas entre España y Francia. Por los delitos imputados responde a una pena de tres años de prisión.
Para escapar de la condena se ocultó en Marbella con un perfil de hoteles de cinco estrellas y coches de alta gama , dinero abundante en efectivo y varias filiaciones para no ser detectado. Así vivía en la Costa del Sol, hasta que el pasado abril se descubrió al saltarse un control rutinario y provocar una peligrosa fuga.
El Grupo de Atención al Ciudadano y la Unidad de Prevención y Reacción habían dispuesto un control rutinario de vehículos y sustancias estupefacientes en la salida a una vía rápida en Marbella. Allí vieron como un Bentley, coches hechos a medida y valorados en más de 100.000 euros, se acercaba «en actitud esquiva» .
Fruto de los nervios y, ante el temor de ser capturado, el conductor se saltó el control. Para ello, a gran velocidad, se fue cambiando de carril, sin obedecer a las órdenes de detener la marcha de los agentes y esquivando a los vehículos que se encontraba en su paso . Ante esta actitud, y sin saber quién era el conductor, los policías montaron otro dispositivo para detenerlo.
Comenzó una fuga por la A-7 hasta Estepona, donde intentó hacer un cambio de sentido. A la altura de Agrojardín se paró. Detuvo el vehículo. Al ver que le seguían, volvió a arrancar para dar esquinazo a los agentes, pero entró en una calle sin salida. A corralado, abandonó el lujoso vehículo y trato de huir a pie . Es cuando uno de los policías le dio alcance.
El fugado se resistió. La detención no fue fácil, pues acabó en una pequeña pelea en el suelo, hasta que fue reducido y esposado. En ese momento se le cacheó y llevaba encima 2.110 euros en efectivo, así como dos cartas de identidad francesas con dos alias diferentes. De igual modo, llevaba encima dos permisos de conducir franceses , que respondían a las dos indentidades de las cartas.
Fue detenido por los delitos de atentado a la autoridad, desobediencia grave y contra la seguridad vial, pero la historia se complicó en la comisaría. Allí, la Policía Científica sacó sus huellas, para poder cotejarlas y saber cuál de las identidades era la real. La sorpresa es que el escaneo en el sistema arrojó cinco alias asociados a este sujeto, uno de ellos alojado en el hotel Guadalpín de Marbella de cinco estrellas.
Sobre una de estas identidades es sobre la que pesaba una orden de detención y entrega por los delitos reseñados de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Además, se pudo constatar que el arrestado no tenía permiso de conducir, así como que el coche no era suyo, pero que tampoco figuraba como sustraído .
