Educación

El Gobierno se escuda en las competencias autonómicas para justificar la salida de Informática del Bachillerato

La ministra, Pilar Alegría, asegura que cada región podrá ofertar «cuando considere» materias relacionadas con la competencia digital

La ministra de Educación, Pilar Alegría, este viernes en Málaga junto al consejero de Educación de la Junta, Javier Imbroda, y el alcalde, Francisco de la Torre P. Marinetto

Pablo Marinetto

La salida de Informática como asignatura obligatoria en el Bachillerato contemplada en el borrador del Real Decreto que desarrolla la nueva ley educativa , la Lomloe, no deja de levantar asperezas en el sector educativo y también empresarial, teniendo en cuenta las competencias en esta materia que han de demostrar los nuevos profesionales que se incorporan al mercado laboral.

El Gobierno se ha escudado en las competencias a nivel educativo que tienen las comunidades autónomas para justificar que se haya eliminado la obligatoriedad en el curriculum de bachiller de la denominada TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) . En este sentido, la ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría , ha asegurado este viernes que al margen de las modificaciones que establece la reforma educativa, cada región p odrá ofertar «cuando considere» , asignaturas y materias relacionadas con la competencia digital.

Sociedades científicas, colegios profesionales y asociaciones de estudiantes y profesores han puesto el grito en el cielo y han presentado alegaciones al Proyecto de Real Decreto por el que se establecerá la ordenación y las enseñanzas mínimas en esta etapa educativa. El texto contempla 42 asignaturas a cursar en función de las 5 especialidades formativas a las que podrá optar el alumnado: Ciencias, Humanidades y Ciencias Sociales, Artes escénicas, Artes plásticas y un bachiller General.

Cuestionada por los cambios y el malestar que ha causado la reforma contemplada en el borrador, la ministra ha vuelto a insistir en que «la asignatura no desaparece» . Si bien, deja en manos de las comunidades su oferta en dicha etapa formativa.

Según Alegría, «lo que hay es un cambio de denominación» y entre primero y tercero de la ESO , los alumnos «van a tener que estudiar obligatoriamente una asignatura que en lugar de llamarse Informática se va a llamar «Digitalización y Tecnología». Además, los estudiantes van a tener 10 asignaturas optativas a elegir en cuarto de la ESO y deberán ser «de obligada oferta al menos 3 de calado y carácter informático o centradas en materia de tecnología y digitalización» , -ha detallado la ministra durante una visita al IES Politécnico Jesús Marín de Málaga junto al consejero de Educación, Javier Imbroda.

Pese a que asegura que el nuevo currículum que está trabajando y desarrollando el Gobierno de España «aparece reflejada la competencia digital desde la educación infantil hasta el bachillerato», la realidad sobre el papel es que corresponderá a las comunidades que la materia esté presente en los dos últimos cursos previos al salto a la universidad.

Andalucía ya ha tomado posiciones sobre esta cuestión y el consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, alertó ayer jueves de que el Gobierno autonómico llegará «hasta el máximo de sus competencias para que si se eso se produjera, los jóvenes andaluces puedan tener la misma igualdad y oportunidades» que los jóvenes de otros países europeos, que a ojos de Bendodo sí ponen el foco en la importancia de la Informática durante el periodo formativo.

Impacto del Covid en las aulas

Durante su visita a Málaga, la ministra Alegría ha repasado también el impacto de la pandemia en los centros educativos , a los que ha definido como «espacios seguros» antes de destacar el éxito del modelo de presencialidad.

Según los datos que ha facilitado este viernes, un total de 24.742 docentes están de baja , lo que supone el 4,28 por ciento de las más de 755.000 personas que componen la plantilla total. Por otra parte, los estudiantes confinados por contagio de Covid-19 o contactos estrechos son 262.450, de los casi 8,2 millones de alumnos del país. Asimismo, las aulas cerradas por contagios son 1.962, el 0,49% de las 405.000 que hay en total.

La ministra considera que las cifras están aumentando porque «las escuelas no son elementos ajenos a la propia realidad» -en referencia a la explosión de casos por la variante Ómicron-. Si bien, ha asegurado que de la misma manera que la incidencia está remitiendo, «en estos próximos días y semanas se verá lo propio en las escuelas» .

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