Prisiones
Extorsionaban a presos en Archidona con deudas en el comercio clandestino dentro de la cárcel
Hay diez detenidos y 17 investigados por esta trama en la que se pagaba con dinero o con trabajos como introducir droga
Teléfonos, un cepillo de dientes, un libro, una tarjeta para llamadas al exterior, droga, jabón o un simple peine son productos que se pueden adquirir dentro de la cárcel en el mercado clandestino , donde algunos presos contraen deudas que luego no pueden pagar. En Archidona, un grupo de reclusos organizados usaban estas deudas para extorsionar a los otro reos que las habían contraído. Así, la Policía Nacional han desarticulado, con la colaboración de Instituciones Penitenciarias, una trama que extorsionaba a internos de la prisión de Archidona , así como a miembros de sus familias.
Lo hacía en relación con supuestas d eudas contraídas con otros presos en la cárcel . Hay diez personas detenidas en el exterior del centro penitenciario. A la vez, que otras 17, entre reclusos y familiares de los mismos, están investigadas por un presunto delito de extorsión .
La investigación, denominada «Operación Ochavada», se inició a raíz de la denuncia interpuesta por la madre de un interno , que llegó a realizar una veintena de pagos a terceros. El importe pagado a esta supuesta red fue superior a 3.000 euros. El objetivo de esta mujer al abonar esas cantidades era poner fin a las amenazas y extorsiones que sufría su hijo en la cárcel por una supuestas deudas contraídas con otros internos.
Las pesquisas realizadas por los investigadores vinieron a confirmar como la trama giraba en torno a un sistema, común en todas las cárceles, conocido como «gabela» . El nombre viene de un tributo que se pagaba a los señores feudales en la Edad Media sobre los bienes de primera necesidad. El más conocido fue el de la sal en Francia.
Pasados los siglos, este nombre se le impone al sistema de comercio con el que lo presos desarollan un mercado de estraperlo dentro de las prisiones españoles . Y que en este caso suposo la adquisición de supuestas deudas por la compra de productos dentro de la cárcel.
Los agentes constataron como, a l menos tres internos en Archidona, habían sido amenazados y extorsionados para hacer frente a deudas que se habían perpetuado en el tiempo, sin llegar nunca a resarcirse por completo debido a los altos intereses que generaban con los reclusos a los que habían hecho algún tipo de compra.
Droga en un vis a vis
Así, los perjudicados, ante el temor de que los extorsionistas cumplieran sus amenazas de causar un daño a ellos o a sus familiares, solicitaban la ayuda de sus parientes directos, quienes a su vez accedían al pago de la deuda. Esto se hacía mediante lo que se conoce en el argot carcelario como «sistema de códigos» .
Bajo este procedimiento, a través de empresas de envío de dinero, los familiares de las víctimas realizaban ingresos a nombre de terceros , en su mayoría allegados en el exterior de los presos investigados. De esto modo, los extorsionadores se aseguraban obtener el dinero por sus amenazas sin que quedara constancia de lo que estaba ocurriendo dentro de la prisión.
Los agentes del Grupo de Atracos de la Comisaría Provincial de Málaga, no sólo han detectados pagos con dinero, si no también forzando a la familia a hacer «favores» o trabajos para extorsionadores dentro de la cárcel. Entre los investigados figura un interno de 48 años y nacionalidad española, a quien también se le acusa de proponer a un familiar de una de las víctimas, supuestamente, introducir droga en la prisión en un vis a vis . De los hechos conoce el Juzgado Único de Archidona.