Detenido un padre tras abofetear a su hijo que llevaba años amenazándolos de muerte

Un padre fue detenido en Málaga capital por abofetear a su hijo de 14 años al volver del trabajo. La Policía Local de Málaga tuvo que intervenir para terminar con una riña familiar que acabó con el padre arrestado, cuando los dos progenitores volvieron a sentirse amenazados por su hijo. En medio del desafío del menor, el padre respondió con violencia para calmar a chico. Unos bofetones que le llevaron al calabozo por agredir al menor después de años soportando el maltrato del chico .

Los hechos ocurrieron el pasado 26 noviembre en un barrio de la capital. El progenitor regresó de trabajar, después de su jornada laboral, a su domicilio en el distrito de Carretera de Cádiz. Y lo que iba a ser una vuelta placentera al hogar para descansar se tornó un infierno conocido de amenazas y gritos . Cuando entró en el domicilio encontró a su hijo jugando a un videojuego en la «Play Station». Al ir mal en los estudios, le recriminó lo estaba haciendo. Le dijo que debía estar estudiando y no jugando a videojuegos. El hijo no aceptó la riña del padre y se le encaró, como era su costumbre. Esto detonó una pelea que acabó con el padre arrestado.

Al exigirle el padre que dejara de jugar, el chico respondió de forma violenta para decirle que «lo estaba agobiando» y conseguir así que lo dejara seguir jugando a la videoconsola. El chico le dijo al padre que no quería estudiar y que él hacía lo que quería . Este menor es definido por las fuentes consultadas como un «ni-ni». Un menor que «ni estudia ni trabaja» y que, además, es conflictivo en las aulas. Los agentes que se han hecho cargo de la investigación aseguran que tiene un nutrido historial de expulsiones de clase por su mala actitud.

Según los investigadores, el menor tenía en casa con sus familiares un comportamiento tirano y violento. La agresividad con la que contestaba o reaccionaba a las reprimendas de sus progenitores era sufrida por su padre, madre y h ermana pequeña de tan solo dos años . Con ese historial, tras encararse por enésima vez aquel día con su progenitor, el padre reaccionó perdiendo la paciencia y le propinó varios guantazos para controlar la situación.

La pelea fue fuerte, hasta el punto de llamar la atención de los vecinos. La comunicación entró en la Sala del 092 de la Policía Local por parte de un particular. Cuando los agentes se personaron en el domicilio para ver de qué se trataba la riña, pudieron constatar que había un menor que había sido agredido. El chico tenía varias marcas por las bofetadas y lo llevaron a un centro médico, donde se hizo un parte de las lesiones. En base a esto, el padre fue detenido por un delito de malos tratos en el ámbito familiar , aunque su esposa no quiso poner denuncia.

La madre del menor dijo a los agentes que no quería denunciar a su marido por haber pegado a su hijo. Fue la mujer la que relató un rosario de años violencia ejercida por parte del chico hacia sus padres. En la declaración ante los agentes, afirmó que el menor de 14 años llevaba años descargando su agresividad con ellos. Señaló que era un adolescente agresivo y que temía por su integridad, ya que desde hacía años los amenazaba de muerte .