Desescalada en Málaga
Así ha abierto sus puertas este lunes el único hotel cinco estrellas gran lujo de Málaga capital
El Gran Hotel Miramar, propiedad de la cadena Hoteles Santos, recibe a sus primeros clientes con las zonas comunes disponibles, aunque con aforo limitado y medidas de seguridad
Cruzar su entrada es trasladarse directamente a otra época. Un tiempo de grandes salones, bailes nocturnos y apellidos ilustres. La pandemia del Covid-19 no ha logrado acabar con esa atmósfera de pulidos modales que se respira en el Gran Hotel Miramar . El único cinco estrellas gran lujo de la capital de la Costa del Sol ha abierto hoy sus puertas y la «nueva normalidad» también ha llegado al palacio.
En el primer día de apertura tras el confinamiento se aprecian sutiles cambios en la actividad del hotel , que previsiblemente se mantendrán hasta que el coronavirus no sea ya más que un recuerdo.
En la entrada, los señeros botones de traje oscuro y sombreros de copa le han cedido el testigo temporalmente a los geles desinfectantes, que ahora reciben a los clientes justo antes de cruzar las puertas hacia la recepción y el patio central. Aquí se han eliminado las alfombras, se ha instalado cartelería digital y se ha reducido el número de mesas y sofás que hasta ahora permitían contemplar cómodamente del mestizaje de estilos de su arquitectura decimonónica.
Son sólo algunas de las medidas que ha adoptado la dirección del hotel para garantizar la seguridad de los clientes y que son comunes en todos los establecimientos de la cadena Hoteles Santos , a la que pertenece.
Este mismo lunes una de sus habitaciones acogerá ya a los primeros clientes, que encabezan la lista de reservas para los próximos meses. Málaga se encuentra desde hoy en la fase 2 de la desescalada por lo que la movilidad entre provincias aún no está permitida. Sí bien, puede que los huéspedes se hayan desplazado hasta la capital por motivos laborales, uno de las excepciones que contempla la orden publicada en el BOE.
La particular desescalada del hotel viene marcada también por las medidas de distanciamiento. El director de Ventas, Andrés Guerrero , ha explicado a ABC que se ha puesto a la venta sólo un tercio de las habitaciones, todas ellas en la cara sur del edificio, que son las que disponen de mejores vistas hacia la playa de la Caleta.
«Tenemos unas 35 habitaciones disponibles distribuidas en las seis plantas. Son alternas unas con otras para evitar al máximo el contacto entre los clientes», señala Guerrero, que destaca la desinfección como eje para articular las medidas de seguridad. Las habitaciones que han estado ocupadas, no volverán a ponerse a la venta hasta pasadas 48 horas . Es el tiempo que han estimado para que la higiene sea total, para lo que también han eliminado también los objetos de decoración superflua como cojines o alfombras.
La llegada de los clientes estará marcada también por una serie de protocolos que evitarán cualquier riesgo de contagio. Así, todas las maletas serán desinfectadas con ozono y geles antes de subir a la habitación. Desde la cadena han apostado por las alternativas digitales y toda la cartelería se ha suprimido para ceder el mando a pantallas y códigos QR. Tanto en los elementos de información repartidos por las instalaciones como en las cartas del restaurante.
El director de Ventas cree que las estrictas normas de higiene crearán pequeñas fricciones en cuento al servicio habitual que se suele prestar en el hotel. «Tenemos claro que estamos ofreciendo un servicio de mayordomía: qué quieres, cuándo lo quieres, cómo y a qué hora. Así es exactamente como se va a hacer, para que el cliente tenga esa atención personalizada , pero manteniendo los estándares de seguridad», ha subrayado.
En este arranque de actividad se ha incorporado en torno a un tercio de la plantilla de 150 trabajadores , que permanecían en un ERTE. Esta mañana uno de los empleados trabajaba en la puesta a punto de la piscina, ya que la apertura de las zonas comunes es también una de las novedades de esta fase 2. No obstante, como en casi todo, habrá limitaciones de aforo, aunque «a priori» no será un problema dado que la ocupación del hotel también irá creciendo de forma paulatina.
Desde la cadena confían en que las reservas aumenten conforme las medidas de distanciamiento se moderen y se vayan abriendo corredores que permitan la llegada del turismo internacional . «Es difícil cuantificar o dar una previsión, porque las circunstancias son nuevas y no tenemos un histórico con el que comparar», ha apuntado Andrés Guerrero, que insiste en que para ser el primer día de actividad están «satisfechos» con los resultados, con «un constante goteo de reservas entrantes, tanto por canales online como por venta telefónica».
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