Málaga
Condenan a un exagente de la Guardia Civil por abusos sexuales a una menor de 10 años una década después
Los hechos ocurrieron en un bar del municipio malagueño de Periana propiedad del esposa del agresor y donde trabajaba la madre de la niña
Dos años y medio de cárcel es lo que deberá cumplir un exagente de la Guardia Civil por abusar sexualmente de una menor de diez años hace una década en Periana, municipio de la Axarquía malagueña. Según la sentencia de la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), a la que ha tenido acceso ABC, queda «probado y así se declara expresamente» el abuso sexual al que fue sometida la niña, que denunció cinco años después .
El TSJA ratifica la condena de la Sección Novena de la Audiencia Provincial de Málaga al exagente. Lo hace por unos hechos que se cometieron entre los años 2010 y 2011 en varias ocasiones . La sentencia explica que se acercó a la menor «para satisfacer los deseos sexuales que tenía». Se aproximó interesándose por la pequeña de unos diez años de edad, «aprovechando que la niña se encontraba en el bar donde la madre trabajaba como empleada de la esposa del citado », que es la dueña del establecimiento.
Los hechos probados relatan que, en una ocasión, siguió a la niña hasta el aseo, que se encuentra en la planta inferior de local. Allí aprovechó la soledad del lugar, le cogió la mano introduciéndola en sus pantalones y obligándole a tocarle el pene . En otra ocasión se masturbó frente a ella en ese lugar. Asimismo, en una tercera ocasión, tras hacerla subir a su vivienda en la parte superior del bar se la llevó al salón cercano, dónde la recostó en el sofá y donde le efectuó diversos tocamientos en el pecho y genitales .
La besaba en la boca
La chica no estaba sola en ese último episodio. Fue a la casa del condenado en compañía de su hermana, que es un poco mayor que ella. Sin embargo, el hombre dejó a la hermana en una habitación qué hacía la función de gimnasio, puesto que allí había aparatos para tal fin. Con la víctima aislada en otra sala abusó de ella. La sentencia añade que en otras ocasiones, aprovechándose de que no eran vistos la besaba en la boca .
Los hechos no fueron relatados por la menor hasta diciembre del 2016, cuando ya tenía 15 años. Entonces se lo contó a su madre, que denuncio los mismos ante las autoridades . Una década después de los abusos y más de cinco años desde que se interpuso la denuncia, se le condena en firme a dos años y medio de cárcel.
También se le prohibe aproximarse a menos de 100 metros de ella en los próximos cinco años. Además, deberá pagar 10.000 euros por los perjuicios, secuelas y daños morales producidos.