Hostelería
Cien calles de Málaga se quedan sin nuevos bares cinco años más
El Ayuntamiento ha aprobado este martes una moratoria que impedirá la apertura de nuevos establecimientos en las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) del Centro y el Romeral
El Ayuntamiento de Málaga vuelve a tirar del freno de mano para tratar de lidiar contra la contaminación acústica. Más de un centenar de calles de la capital se quedarán sin nuevos bares y restaurantes los próximos cinco años . Así lo ha aprobado este martes la Comisión de Medio Ambiente, que ha dado luz verde al plan para las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) en el que se contempla precisamente la moratoria de apertura de nuevos establecimientos de este tipo.
La medida, que se aprobará definitivamente en el próximo pleno, afecta a 98 calles del centro histórico próximas a la plaza de la Merced, Uncibay y Mitjana, y las calles Madre de Dios, Compañía, Alcazabilla, Larios y Strachan. Además, vuelve a incluir otras cinco vías de la zona del Romeral , en concreto la avenida Plutarco, y las calles Esquilo, Andrómeda, Sófocles y Margarita Xirgú.
La concejala del área, Gemma del Corral , ha explicado a ABC que se trata de una de las medidas con las que se modifica el ZAS aprobado en octubre de 2018. Una actualización del documento que se ha hecho tras estimar parcialmente ocho alegaciones de las doce que se presentaron e incluir un informe de la Secretaría General que contemplaba el decreto 155/2018 de la Junta de Andalucía que se aprobó con posterioridad al documento municipal.
Entre los cambios que se contemplan destacan la reducción tanto de los horarios de cierre de los establecimientos como de las excepciones que se venían realizando a lo largo de año en la limitación acústica. Los locales, con o sin música, deberán tener cerradas puertas y ventanas a partir de las once de la noche, cuando actualmente es a las 00.00 horas. En consecuencia -señala Del Corral- deberá haber una persona en el local al cuidado de que se cumplan los objetivos a partir de esa hora.
Por lo que respecta a las terrazas , también hay una reducción de horarios que varía en función de la época del año. En otoño e invierno y entre semana, el horario pasa de la 1.00 de la madrugada a las 00.30, mientras que sábados y domingos se reduce de 2.00 a 1.00 horas. En primavera y verano , las terrazas deberán cerrar a la 1.00 en lugar de las 2.00 horas entre semana y a la 1.30 en lugar de a las 2.00 los fines de semana.
Una de las novedades más significativas es la reducción en el número de días en los que se hacían excepciones en las limitaciones horarias para las terrazas. Junto a Navidad, Carnaval, Semana Santa y Feria, tras la apobación se podrá superar la limitación con carácter excepcional sólo 20 días al año , cuando el anterior documento contemplaba hasta 70.
Además -según explica la concejala- «el Ayuntamiento reducirá las actividades que impulsa en el centro», y a las que ya tienen planificadas podrán sumar entre 10 y 15 autorizaciones de dispensa acústica . Desde el Consistorio consideran que el problema del ruido «no proviene solo de las terrazas y la hostelería» y creen necesario «disminuir el número de eventos en la zona ZAS» para alcanzar los objetivos de mejora en la calidad acústica.
Noticias relacionadas