MÚSICA
Charles Aznavour: «Me encanta lo que hago, y siempre que tenga salud y fuerza lo haré»
El gran embajador de la canción francesa actúa en el festival Starlite de Marbella

«El show debe continuar». Y lo hace a los 92 años. La frase, que se le atribuye a Charles Aznavour, parece una filosofía de vida y longevidad sobre los escenarios. De origen armenio y francés de adopción, está considerado como «el embajador de la canción francesa». Aunque no pierde sus orígenes y, fruto de ello, es el embajador de Armenia ante la ONU. Llega a Starlite Marbella hablando de la «buena reputación» del festival y con «la gran experiencia pasada de los amigos Julio Iglesias y Plácido Domingo» como aval sobre el escenario.
— Cantó en «Je m'voyais déjà» que el público no le entendía. ¿Con 92 años ha encontrado la comprensión de ese público?
— ¡No fue autobiográfica! Era la historia de una cantante que lo tenía todo, pero no logró tener éxito. Hay una anécdota interesante con esta canción. Después de haberla terminado fui a ver a Yves Montand para ver si mencionaba algo acerca de cantarla, y la rechazó diciendo que no iba a ser nunca un éxito.
— En aquella canción hablaba de un cantante que estaba convencido de que triunfaría. Ahora que es un mito vivo, ¿qué le diría a aquel cantante?
— A mí me sirvió el trabajo duro, creer en ti mismo, tratar de ser diferente y no tener miedo al fracaso. No vivo en el pasado, sino en el presente. Siempre miro hacia delante para los nuevos proyectos y las nuevas aventuras.
— Cuando echa la vista atrás a 60 años de carrera, ¿qué ve?
— Una vida increíble, con sus altos y sus bajos, pero con más altos que bajos. He sido bendecido con una familia. Y tengo la suerte de hacer lo que me gusta y de seguir haciéndolo todavía.
— Usted es «políticamente incorrecto» y trata de decir lo que la gente piensa. ¿Le ha traído problemas?
—Sí, tuve algunos problemas con «Après l'amour». Fue prohibida en el comienzo de mi carrera por ser «sexualmente explícita». Cuando escribí una canción sobre el genocidio armenio de 1915, «Tombes ils sont», también tuve problemas, pero no me detuve. Soy un hombre libre, escribo lo que quiero, no tengo miedo de las palabras y si me siento inspirado por un tema iré adelante. Cuando escribí «Comme ils disent», en 1972, sobre la homosexualidad fue un shock en el momento, mucha gente dijo que hacer una canción con un tema muy tabú podría ser El cantante Charles Aznavour, aún en forma a los 92 años el final de mi carrera. Estaban equivocados. ¿Cómo alguien que no es gay escribió una canción que es un himno para la comunidad gay en todo el mundo? Porque es una canción sobre el derecho a la diferencia y nadie debe juzgar o condenar esa elección.
— Se ha reconocido el genocidio armenio. ¿Qué significa eso para el país del que es embajador ante la ONU?
— Alemania lo reconoció. Esa es una muy buena noticia. Solo queremos que Turquía reconozca que durante el Imperio Otomano ocurrió este genocidio. No tenemos nada en contra de los turcos de hoy en día.
— Usted que está entre los grandes de la música y ha cantado con leyendas como Frank Sinatra, ¿cómo ve la música actual y las nuevas corrientes como la electrónica o el hip-hop?
— Es algo muy interesante. Algunas letras de rap están muy bien escritas y reflejan la sociedad de hoy en día. Una gran cantidad de artistas jóvenes piden probar con mis canciones y estoy totalmente de acuerdo. Hace algunos años Dr. Dre, Eminem y Xzibit me mezclaron.
— Le he leído que «el futuro es de los artistas», pero parece que es de los ingenieros y la electrónica. ¿Cómo ve el futuro de la música?
— Si usted está hablando de los DJ, es necesario todo tipo de música. La música de baile es sinónimo de la juventud actual. David Guetta, que es francés, está en el cénit de su carrera. Pero la gente como Adele, Taylor Swift, Lady Gaga, Justin Timberlake, Justin Bieber o Beyoncé, si no son destruidos por el negocio de la música, podrían tener carreras largas.
— Entre todos los nombres de su carrera destaca Edith Piaf. ¿Qué fue para usted?
— Estuve ocho años con Piaf, porque éramos amigos, nunca fuimos amantes. Fue una artista increíblemente instintiva, que rompió límites con la elección de sus canciones, su presencia en el escenario, su interpretación con la voz única e irremplazable. Lo sorprendente es que es más conocida y apreciada ahora que cuando estaba viva.
— A los 92 años, ¿no le apetece estar tranquilo en casa?
—No. Ni hablar, no. Mi trabajo es mi vida. Me encanta lo que hago, y siempre que tenga la salud y la fuerza para hacerlo lo haré. Escribo todos los días, ya estamos haciendo la reserva de fechas para 2017 en América Latina, Rusia, Estados Unidos, Canadá y muchos lugares más.