Archidona
Bloqueo a una inversión de 15 millones de euros por la presión vecinal en un pueblo de Málaga
El Ayuntamiento de Archidona trata de frenar una planta fotovoltaica que cuenta con todos los permisos por su cercanía a las últimas casas de una de sus pedanías
La empresa Watt Development lleva desarrollando desde 2017 un proyecto fotovoltaico en Archidona (Málaga). A lo largo de estos tres años han tenido todos los informes favorables tanto del Ayuntamiento como de la Junta de Andalucía, pero las quejas de un grupo de vecinos de la pedanía Huertas del Río han hecho que el proyecto encalle, quizás para siempre.
El problema ha surgido cuando se ha solicitado la licencia de obras al Consistorio para construir la planta solar, que tiene una inversión de 15 millones y supone 100.000 horas de trabajo para su desarrollo. «Ni el Ayuntamiento ni los vecinos han presentado alegación alguna al proyecto durante todo el proceso, habiendo estado incluso expuesto en el propio Consistorio», remarca Alejandro Olbiol, director de la compañía.
Pero una vez pedida la licencia de obras, que tiene de plazo para ser otorgada hasta el 28 de agosto, el Ayuntamiento ha impuesto un recurso de alzada al proyecto , como confirma Mercedes Montero, alcaldesa de Archidona por el Partido Socialista, para paralizarlo hasta que se aprobara el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).
Finalmente, la Junta dio el jueves el visto bueno a la nueva ordenación, pero dejó en suspenso el artículo que debía cancelar la planta solar . Ahora el Consistorio debe presentar informes mientras la empresa espera para ver si puede arrancar las obras.
El problema estriba en la queja de los vecinos por la cercanía de este parque solar a sus casas. Cuando comenzó a tramitarse el proyecto en 2017, la normativa del municipio no obligaba a mantener distancia con las viviendas. Aun así, la arquitecta del Ayuntamiento exigió que las placas solares se retirasen 25 metros de las últimas siete casas de la pedanía, como en otras infraestructuras similares que ya existían en Archidona. La empresa aceptó, e incluso propuso una barrera vegetal con arboleda para evitar el impacto visual que pudieran tener los habitantes. Una vez definido todo esto, comenzó la tramitación de todos los permisos necesarios, que fueron llegando sin problemas.
Plataforma ciudadana
Pero en este tiempo, las voces críticas se aglutinaron en una plataforma ciudadana y, con el paso de los meses, se convirtieron en un quebradero de cabeza, que hizo que el Consistorio se alineara con ellos contra la empresa. Había que parar la instalación a ambos lados de la A-92 , siendo la parte sur la más cercana a las viviendas (40 por ciento del proyecto) y la norte la que rodea a la subestación eléctrica de Endesa donde conectará para suministrar energía. La planta sería colindante con otra instalación similar conectada en 2008 en este punto.
Así, en enero de este año, el Ayuntamiento decidió incluir en el PGOU una alegación para que la distancia entre las placas y las viviendas fuese de un kilómetro , por lo que la parcela en la que se iba a construir la planta ya no valdría y se tendría que hacer el proyecto en otro lugar, que no es viable por la normativa vigente. Esta alegación es la suspendida por la Junta hasta que se presenten los informes necesarios.
El problema es que todo esto puede retrasar más de cinco años la construcción de la planta y el parque solar perdería el visto bueno del Gobierno, que da ese plazo para evitar sobrecargas en los suministros. «Si no se hace, estamos dispuestos a asumir hasta un posible contencioso al que nos pueda llevar la empresa, pero nuestra postura es la de los vecinos », explica la alcaldesa Montero a ABC. Postura que, como reconoce la empresa, puede acarrear indemnizaciones millonarias al municipio, así como la pérdida de puestos de trabajo o de un proyecto agrícola y conservación de especies autóctonas en este área.