Seguridad
Agentes reclaman armeros blindados tras el suicidio de un compañero que sustrajo un arma
El guardia civil, de baja psicológica, se hizo con la pistola de otro agente sin que éste se percatara
Gran malestar entre la plantilla de la Guardia Civil de Málaga por la ausencia de armeros blindados en los que los agentes puedan guardar sus armas y que, según fuentes consultadas, habrían evitado que un guardia de baja sustrajese la pistola a un compañero para después suicidarse con ella.
Los hechos se produjeron este domingo, cuando un miembro del Instituto Armado de Cártama que se encontraba de baja psicológica y al que le habían retirado el arma por este motivo, se hizo con la de un compañero –sin que éste se percatase– y abandonó las dependencias.
Las citadas fuentes explicaron a este periódico que el agente se quitó posteriormente la vida. Al parecer estaba pasando una época complicada por cuestiones personales.
Este suceso ha generado un gran malestar en la plantilla de la Guardia Civil, que desde hace tiempo viene reclamando que sus instalaciones cuenten con armeros blindados individualizados en los que poder guardar con total seguridad y tranquilidad sus armas reglamentarias.
Las fuentes consultadas señalaron que si este equipamiento estuviese disponible, difícilmente el guardia habría podido hacerse con la del compañero.
