Multan a un vehículo del banco de alimentos mientras repartía comida

El banco de alimentos de la Asociación de Vecinos de Lagunillas atiende a una media de 500 familias de esta céntrica barriada malagueña que cada semana acuden a retirar unos productos que pueden ser la diferencia de enfrentarse a un plato lleno o vacío. Pero esta labor que Francisco López y otros residentes de la zona llevan ejerciendo desde el inicio de la crisis puede verse truncada. ¿El motivo? No pueden afrontar el pago de 880 euros en multas que les han puesto por aparcar en doble fila o estacionar en una zona prohibida mientras recogían o entregaban comida. Ya han recibido las notificaciones y si los conductores no abonan las tres sanciones, podrían ser embargados. «Nadie quiere coger ya la furgoneta por miedo», aseguran.

López explicó a ABC que las sanciones suponen un quebranto para una asociación que no tiene ingresos y que lo único que pretende es ayudar a las personas más necesitadas. Reconoce que esas multas posiblemente estén bien puestas con el código de circulación en la mano, pero afirma que centenares de conductores aparcan todos los días en doble fila o en una zona con línea amarilla y que ellos sólo lo hicieron para auxiliar a gente con problemas.

Al no estar presente el conductor cuando se impusieron, inicialmente se consideró responsable a la asociación, aunque unas gestiones de Francisco López logró «liberarles» parcialmente de esa carga. «El problema es que ahora nadie quiere conducir la furgoneta por miedo a ser sancionado y tener que responder con su dinero», explica, para añadir que «la mayoría de las personas que colabora con el banco de alimentos son humildes y no pueden pagar las cantidades que se imponen».