Sebastían Martínez muestra su apoyo a los que sufren en su investidura como nuevo obispo de Jaén

Sebastián Martínez Chico es desde hoy el septuagésimo sexto obispo de la diócesis de Jaén. Murciano, de 53 años, ha sido investido durante una celebración eucarística a la que han asistido una treintena de prelados de otras tantas diócesis de España y miles de fieles, a los que ha querido hacer partícipes de un ministerio que tendrá muy en cuenta a los que sufren .

«Vengo con el único programa de unirme a vosotros y caminar juntos, como vuestro servidor, de todos, pero de forma especial de los pobres, los débiles, los enfermos, los que no tienen hogar, los migrantes», ha expuesto Chico, quien ha aclarado a los últimos que cuentan «con el amor preferencial de Dios. Sois las llagas abiertas de Cristo que tenemos que besar con nuestra atención, cercanía y ternura» .

La sucesión en la diócesis de Jaén constituye, ha dicho, un momento importante en el devenir de la Iglesia, en la que cambian las personas, pero permanece el ministerio y el servicio al pueblo santo de Dios. « La Iglesia del Señor continúa y crece por obra del Espíritu Santo , que nos envió el Resucitado, por medio de la Palabra y el ministerio de los apóstoles. Demos gracias a Dios, en este día, por cómo nos está cuidando».

Consciente el momento que vive la sociedad y la Iglesia como parte de ella, ha confiado en la gracia de Dios su labor y la de los laicos que trabajan por el Reino: «Juntos, viviendo la comunión, la participación y la misión, es decir, en sinodalidad, continuaremos la misión que el Señor nos encomendó, con el realismo y la profundidad que esto significa e implica».

En este sentido, el nuevo obispo ha aludido a los obstáculos que encuentra la Iglesia católica en la actualidad, que, en su opinión, son capaces de incidir «en nuestra vida cristiana y en nuestra vocación». No obstante, ha añadido, «sabemos que vivimos el tiempo de Dios. Él nos ayudará a superarlos a través de nuestros dones, de las iniciativas comunitarias y, sobre todo, con su Gracia».

Su predecesor en el cargo, Amadeo Rodríguez Magro , le ha dado la bienvenida y ha resaltado que encontrará una iglesia en movimiento: «Durante estos poco más de cinco años hemos sido una Iglesia sinodal y ahora se la encontrará activamente participando en el sínodo al que nos ha convocado el Papa Francisco , en el que se nos invita a afianzarnos en nuestra identidad de Iglesia caminante y en salida. Le puedo asegurar que la participación activa, creativa e ilusionada en el sínodo universal está plenamente encauzada».

Por su parte, el nuncio apostólico de Su Santidad en España, Bernardito Auza , ha felicitado a Sebastián Martínez por su nuevo destino apostólico. Y le ha recordado las palabras del Papa Francisco que propone aplicar a la vida del obispo el espíritu de las Bienaventuranzas : «Con este espíritu de las bienaventuranzas, que se discierne bien mirando el Santo Rostro, podrá hacer realidad, en esta querida Diócesis de Jaén, su manifestada voluntad de “ser - aquí - un pastor según el corazón de Cristo, un hombre de esperanza».